Los 15 inquilinos que sufrieron incendios por el apagón podrán reclamar indemnizaciones al Gobierno

Los bomberos de Madrid registraron 15 incendios en la capital debido al apagón del pasado 28 de abril que ahora podrían reclamar al Gobierno que preside Pedro Sánchez, por los perjuicios ocasionados. Los fuegos se registraron en distintos barrios de la ciudad. Cuatro en Hortaleza, tres en Carabanchel, dos en el distrito de Salamanca, dos en Ciudad Lineal, uno en Chamartín, uno en Villa de Vallecas, otro en Retiro y uno en Usera.

Las reclamaciones podrían llegar hasta el Ejecutivo, como responsable final de Red Eléctrica. Tanto por su labor en la gestión de la compañía como por ser el máximo accionista de la misma.

Las direcciones que se vieron afectadas son: Serrano 117, sede central del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, (CSIC). También Palermo 42, Bravo Murillo 97, Américo Castro 120, Clara Campoamor 57, Esteban Mora 30, Afluentes 7, Miguel de Unamuno 14, Granada 14, Gustavo Pérez Puig 75, Moreja 32, Abizanda 15, un edificio multiusos en Núñez de Balboa 1, General Pardiñas 87 y General Cisneros 53.

El incendio ocurrido el 28 de abril de 2025 en la calle Clara Campoamor nº 57, en Carabanchel, se saldó con la vida de una persona, mientras 13 resultaron intoxicadas. El motivo del incendio fue una vela. En el resto de los incendios registrados en Madrid no murió nadie.

Respecto a este edificio, no consta en la Jefatura de Bomberos ninguna actuación supervisora en materia de autoprotección en ese inmueble. El edificio es del año 1961 y está bajo normativa antigua, previa a la que rige en el sector.

Además del fallecido en Madrid, el apagón dejó varias víctimas mortales en toda la península. Entre ellas, un matrimonio de 81 y 77 años, junto a su hijo de 56, en Taboadela (Orense). Todos ellos murieron por inhalación de monóxido de carbono, aparentemente debido a un generador utilizado para alimentar un respirador médico durante la interrupción del suministro eléctrico.

También se registraron víctimas en La Coruña, en las localidades de Ferrol (1), Dumbría (1) y Betanzos (1).

Además, un paciente con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) perdió la vida en Castilla y León debido a la falta de energía para su equipo de soporte vital. Finalmente, en Basauri (Vizcaya), una residente de un centro de mayores que dependía de oxígeno también murió a causa de la falta de energía.

En Alcira (Valencia), una mujer de 46 años con una grave enfermedad cardiopulmonar murió al quedarse sin oxígeno. El respirador que utilizaba para sobrevivir dejó de funcionar a los pocos minutos del apagón.

En Algeciras (Cádiz), una persona perdió la vida en uno de los tres incendios domésticos registrados durante la madrugada del apagón. El más grave ocurrió en la urbanización Parque Bolonia, donde las llamas consumieron un piso entero. Aunque la mayoría de los vecinos pudieron escapar por su cuenta, uno de los residentes no logró salir a tiempo.

Responsabilidades

Casi dos meses después del apagón, aún no se conocen las causas que pudieron provocar el mismo y tampoco se depuran responsabilidades.

Además, con el fin de evitar dar indemnizaciones, el Gobierno mantiene el relato de que el apagón se debió a múltiples causas, tal y como dijo la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen,  y, por tanto, no se le puede achacar a un solo actor, ni siquiera a Red Eléctrica.

Esto es muy relevante, puesto que, si no se puede considerar responsable al Gobierno, tampoco tendrá que afrontar las multimillonarias indemnizaciones que probablemente se van a solicitar por las pérdidas ocasionadas por el apagón.

Eso sí, el informe sobre el apagón presentado el martes por la ministra Aagesen ha provocado la guerra total del Gobierno con Red Eléctrica. Su presidenta, Beatriz Corredor, respondió este miércoles con un contrainforme que presentó en rueda de prensa para exculpar al operador del sistema eléctrico. Fuentes del sector aseguran que se trata de su sentencia de muerte y señalan como probable sucesora a Natalia Fabra.

Como informó OKDIARIO, aunque Aagesen cargó el grueso de la culpa del apagón en las empresas eléctricas, no pudo ocultar algunos fallos de Red Eléctrica que fueron cruciales para que toda España se quedara sin luz: reconoció que falló una de las centrales de gas que estaban previstas el día anterior al apagón (se declaró indisponible) y que Red Eléctrica (REE) no la sustituyó por otra, lo que dejó al sistema en situación muy vulnerable.

Según el informe del Ministerio de Transición Ecológica, REE ni siquiera tuvo encendida alguna central de gas sin generar electricidad por seguridad, ni tampoco puso en marcha centrales hidroeléctricas cuando empezaron los problemas. Y cuando empezó la caída, fue incapaz de aplicar cortafuegos que impidieran que se extendiera a toda la península.