Investigación

La Guardia Civil ya tiene el móvil del descuartizador de Pioz

“Tranquilo, educado y pendiente de todo”. Así es como ha comparecido este jueves Patrick Nogueira, el descuartizador confeso de Pioz, en el Juzgado no 1 de Guadalajara. Eso es lo que han asegurado a OKDIARIO fuentes jurídicas presentes en la sala mientras se practicaba la diligencia del volcado de la información contenida en su teléfono móvil, un iPhone 6 blanco que compró en el mes de junio por 235 euros en la calle Atocha de Madrid con una identidad falsa. Fue en aquellos días en los que su cuenta en Banco de Brasil arrojaba un saldo positivo de 8.000 euros y que el ahora detenido aseguró a los agentes haber conseguido con los ahorros de su propio trabajo en Brasil y la venta del coche que utilizaba en su país antes de viajar a Europa.

La tarjeta SIM que daba servicio al terminal era la de su número brasileño y los datos del aparato podrían haber sido borrados. Un trabajo realizado por un experto sería la única barrera para que los investigadores de la Guardia Civil no accediesen a la información que buscan.

Se ha solicitado una comisión rogatoria a Brasil para que el juzgado entregue una copia de todo lo actuado allí en lo relativo al proceso contra Marvin Henriques Correia, su presunto cómplice en la distancia y con el que compartió imágenes y mensajes en tiempo real en el momento de los crímenes.

El joven de 18 años permanece en la prisión de máxima seguridad Romeu Gonçalves de Abrantes y cuenta con especial protección que garantice su integridad física. Situación similar a la que vive su amigo Patrick en la prisión española de Alcalá Meco, donde permanece aislado y observado las 24 horas del día. Las acusaciones han solicitado que Marvin sea llamado para responder ante el Juzgado y afrontar en España las consecuencias penales de su participación en los hechos.

Pero Sheyner Asfora, el prestigioso abogado y criminólogo que defiende a Marvin, sostiene que su cliente está exento de responsabilidad penal en Brasil, de modo que no podría ser extraditado: «Para ser cómplice, tendría que haber tenido ayuda material, y no la hubo, tendría que haberle inducido, y él no indujo a Patrick para intentar los crímenes ni le instigó”.

A pesar de la presunta recepción por parte de su defendido de más de 80 fotografiaras de su amigo junto a los cadáveres de sus tíos y primos, el letrado afirmaba a los medios en Brasil que “aunque la conducta de Marvin puede ser reprobable desde el punto de vista ético, moral, social e incluso de los principios cristianos, no es censurable en la ley penal. En este sentido, vamos a demostrar la ausencia de su responsabilidad penal en toda esa historia“.

A Patrick también se le comunicaron las calificaciones provisionales. El Ministerio Fiscal reiteró la suya de dos homicidios y dos asesinatos, mientras que para las acusaciones particulares los hechos deben ser juzgados como cuatro asesinatos, pues consideran que en todos ellos ha existido alevosía y que los crímenes fueron premeditados. Patrick preparó un plan, compró días antes los materiales necesarios para acabar con la vida de sus parientes y además se sirvió de ese vínculo familiar para contar con la confianza de las víctimas.