Investigación
CRIMEN EN CEUTA

Los asesinos del menor de Ceuta intentaron confundir a la Policía: «Discutía con todos»

Los investigados y luego detenidos por el crimen de Mohammad de 16 años en Ceuta el 13 de enero de 2022. Los restos del joven no fueron encontrados hasta febrero de 2023 tras confesar sus presuntos asesinos el lugar donde se deshicieron del cadáver, en el monte de la Tortuga de Ceuta. Los tres detenidos por la Policía Nacional por el crimen de Mohammad ingresaron en prisión. Pero durante los interrogatorios previos todos intentaron desviar sin conseguirlo la atención de los investigadores de la Guardia Civil. «Mohammad era muy follonero (…) Había gente que lo molestaba», llegó a declarar una de sus mejores amigas, luego detenida por su homicidio e incluso en una segunda declaración añadió que «es muy follonero, discutía con todos».

El 16 de febrero de 2022 la Policía tomó declaración a la menor S. en las instalaciones de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta. OKDIARIO ha tenido acceso a esa declaración en la que la joven dijo que no había tenido contacto con el joven desaparecido desde el 13 de enero de 2022 «cuando le escribió para quedar con ella, pero éste no se personó a la cita». Según las investigaciones policiales, esta joven, en compañía de su novio mayor de edad y del asesino material de Mohammad, contribuyó a deshacerse del cuerpo del fallecido arrojándolo por la ladera de un monte ceutí, sin prestarle ayuda tras haber sido apaleado por otro de los detenidos.

Es más, sabedora de que la Policía investigaba el suceso como una desaparición no voluntaria, la joven S. arrojó la sombra de la sospecha sobre el fallecido, al afirmar que el grupo de amigos había tenido un problema con el joven en noviembre de 2021 porque «es muy follonero, discutía con todos y tenía fotos privadas de todos con las cuales nos amenazaba con publicarlas».

La joven llegó a declarar que «cuando el grupo de amigos se distanció de Mohammad, éste comenzó a irse con un tal Javi, alias La Polaca, sin poder aportar más información». Cuando los agentes preguntaron a la menor si el entonces desaparecido tenía problemas con alguien, respondió que «éste le dijo en una ocasión que había gente que lo molestaba y que lo estaba amenazando con que querían quitarle el móvil y que cada vez era más personas las que realizaban tales amenazas (…)».

Una declaración posterior de la joven, en concreto el 23 de febrero de 2022, ratificó que «sí acudió a la cita que había concertado con Mohammad sobre las 18.00 horas a 18.30 (…) en la parte de atrás del Instituto 7 Colinas (…)». Allí habría acudido en compañía de su novio y de Ahmed en coche y luego arrojó una sospecha sobre quien sería acusado de su asesinato, Ahmed, al afirmar que «Ahmed sí era parte del grupo de amigos de Mohammad pero que en este momento estaban distanciados y que cada uno tomaba caminos distintos».

Al día siguiente la Policía tomó declaración a Ahmed. Éste, acusado de ser el autor material de la muerte del joven ceutí, declaró que «la relación de amistad de Mohammad con el grupo de amigos llega hasta los días 23 o 24 de diciembre, donde por un desencuentro con (…) y (…), a los cuales debía aproximadamente 60 euros, además de problemas con (…) de la cual tenía fotos íntimas y amenazaba con publicarlas les llevó a dejar de estar juntos» y luego intentó de nuevo desviar la atención sobre este otro grupo: «Mohammad empezó a decirles que les tenía miedo» porque «tanto (…) como (…) le exigieron  dichas cantidades de forma amenazante y que además (…) le amenazó con quitarle el móvil y rompérselo para poder borrar las fotos que le comprometían».

Este joven, presunto asesino de Mohammad, también echó la culpa de la desaparición del joven a «su amigo (…) ya que por celos de la relación de Mohammad con (…), envió en agosto del año 2021 a su madre Asma un vídeo en el que mantenía relaciones sexuales con (…). Este hecho fue contestado por Mohammad publicando un vídeo de (…) consumiendo cocaína». Para terminar su relato el presunto asesino de Mohammad se atrevió a declarar que «en las batidas de búsqueda que se realizaban la madre Asma sólo lloraba cuando la prensa estaba presente, si bien cuando estaban a solas se reía y tenía una actitud muy relajada». Tras escucharlo la Policía de Ceuta tomó testimonio al novio de la joven, único mayor de edad y detenido también por el asesinato de Mohammad aunque en su declaración dijo que «no ha tenido ninguna relación estrecha, ni personalmente ni a través de redes sociales, simplemente saludos de cortesía y poco más». A pesar de los intentos por desviar la atención a otros, la Policía acabó atrapándolos.