Internacional

Todo lo que se sabe de los ‘Facebook Papers’: el escándalo que arrincona a la red social de Zuckerberg

  • Iñigo Artola
  • Portadista. Redactor de cultura, internacional, política, sociedad y lo que haga falta. Devorador insaciable de series y películas.

Facebook atraviesa una nueva crisis a costa de los bautizados como Facebook Papers (‘Los papeles de Facebook’ en castellano). Una serie de documentos entregados por la ex empleada de la red social Frances Haugen, 10.000 documentos, ofrecen una visión a los entresijos de la compañía propiedad de Mark Zuckerberg: su cultura interna, su forma de ver y tratar la desinformación, la moderación del discurso del odio, la investigación interna sobre el algoritmo que rige la difusión de noticias y las comunicaciones internas en relación con el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero son algunos de los temas más controvertidos que están bajo la lupa de la sociedad.

En total son más de 10.000 páginas las entregadas por la denunciante Frances Haugen sobre las prácticas de Facebook. Haugen testificó en el Congreso de los EEUU dando fe del contenido de esos documentos que fueron toda una revelación para la Comisión de Valores y Bolsa y también para el Congreso norteamericano.

Frances Haugen, ex empleada de la compañía de Mark Zuckerberg y facilitadora de los ‘Facebook Papers’. Foto: AFP

Un consorcio de medios de comunicación, 17 en concreto, han tenido acceso a el contenido de esos documentos. Entre ellas la CNN. El pasado viernes, estos medios comenzaron a publicar artículos bajo la etiqueta ‘Facebook Papers’ y a defender la tesis de Haugen: «Los productos de Facebook perjudican a los niños, avivan la división de la sociedad y debilitan nuestra democracia».

«Saben solucionarlo pero no lo hacen»

Haugen lanzaba con su filtración una brutal acusación contra los directivos detrás de Facebook: «Los dirigentes de la empresa saben cómo hacer que Facebook e Instagram sean más seguros, pero no hacen los cambios necesarios porque han antepuesto sus astronómicos beneficios a las personas. Es necesario que el Congreso actúe. No resolverán esta crisis sin su ayuda», dijo instando a los congresistas a actuar frente a una de las redes sociales más usadas en el mundo entero.

Los documentos facilitados por Haugen presentan a Facebook como una empresa que no estaba preparada para hacer frente a lo que en su red social se cocía. Así, la ex empleada facilitó una auditoría interna y un documento en el que se puede conocer las contramedidas que los empleados de Facebook tomaron en tiempo real para luchar contra movimientos como Stop the Steal que usaba su plataforma para organizarse y que jugó un papel crucial en la organización del asalto al Capitolio del 6 de enero. Los documentos prueban que los empleados de Facebook solo comenzaron a tomar medidas cuando el grupo se volvió abiertamente violento.

Tráfico de órganos en Facebook

A su vez, los ‘Facebook Papers’ también corroboran que empleados de la red social habían alertado, en repetidas ocasiones, sobre la falta de capacidad de la compañía para hacer frente a mensajes que incitaban a la violencia en países de riesgo como Etiopía, donde una guerra civil lleva asolando a su población durante el último año. Facebook dice públicamente que Etiopía es una prioridad para la compañía dado el riesgo de conflicto existente pero los documentos filtrados dicen otra cosa: los esfuerzos de Facebook por tratar de controlar el enfrentamiento en sus perfiles no fueron suficientes para afrontar el aluvión de mensajes violentos e incendiarios en su plataforma.

Los llamados ‘Facebook Papers’, facilitados por la ex empleada Haugen también dan cuenta de un episodio muy polémico en la vida de Facebook. Al menos desde 2018, y según esos documentos, los empleados de la red social tenían constancia de la existencia de traficantes de órganos que usan la red social para sus turbios negocios.

El fundador y CEO de Facebook, Mark Zuckerberg. Foto: AFP

El asunto escaló a tal nivel que en 2019, el gigante Apple amenazó seriamente con retirar Facebook e Instagram de la App Store, la plataforma donde los millones de poseedores de dispositivos Apple descargan las aplicaciones. Ante la amenaza, los empleados se afanaron por retirar el contenido problemático, las redes de tráfico de órganos, y a corregir su política de emergencia. El episodio lo describen en los documentos como una consecuencia «potencialmente grave» para el negocio. Lograron aplacar el enfado de Apple pero solo parchearon uno de los problemas internos.

¿Cómo se han defendido desde Facebook?

Desde la compañía de Menlo Park han negado tajantemente cualquier acusación y han acusado a Haugen de seleccionar documentos para presentar al público una visión injusta y parcial de la cultura interna de Facebook.

Sobre el asalto al Capitolio del 6 de enero, el portavoz de Facebook Andy Stone declaró: «La responsabilidad de la violencia que ocurrió el 6 de enero recae en quienes atacaron nuestro Capitolio y quienes los alentaron. Tomamos medidas para limitar el contenido que buscaba deslegitimar la elección, incluyendo el etiquetado de las publicaciones de los candidatos con el último recuento de votos después de que el Sr. Trump declaró prematuramente la victoria, pausar la nueva publicidad política y eliminar el grupo original #StopTheSteal Group en noviembre», dijo Stone.

El ex presidente de EEUU, Donald Trump, y el fundador y CEO de Facebook, Mark Zuckerberg. Foto: AFP

Por su parte, Nick Clegg, vicepresidente de Asuntos Globales de Facebook rechazó cualquier acusación de esta forma: «En el centro de estas historias hay una premisa que es claramente falsa: que no ponemos en primer lugar a las personas que utilizan nuestro servicio, y que realizamos investigaciones que luego ignoramos sistemáticamente. Sí, somos una empresa y obtenemos beneficios, pero la idea de que lo hacemos a expensas de la seguridad o el bienestar de las personas malinterpreta lo que hacemos y dónde están nuestros propios intereses comerciales».

Y la directora de operaciones de Facebook, Sheryl Sandberg, restó importancia a la implicación de la red social en el asalto al Capitolio: «Sabemos que esto se organizó en línea. Lo sabemos», dijo en una entrevista con Reuters. «Nosotros … eliminamos a QAnon, Proud Boys, Stop the Steal, cualquier cosa que hablara de posible violencia la semana pasada. Nuestra aplicación nunca es perfecta, así que estoy segura de que todavía había cosas en Facebook. Creo que estos eventos se organizaron en gran parte en plataformas que no tienen nuestra capacidad para detener el odio y no tienen nuestros estándares y no tienen nuestra transparencia».

Facebook, escondido tras sus muros

Si la presión pública fuera suficiente para hacer cambios en las grandes compañías, Facebook hubiera corregido muchos de sus errors tras el terrible escándalo de Cambridge Analytica o después de las elecciones de 2016. A pesar de que decenas de marcas decidieron retirar su publicidad de la red social por su enfoque débil en la lucha contra el discurso del odio, la compañía de Zuckerberg apenas sintió el golpe en sus rendimientos económicos anuales.

Ahora, los legisladores de Washington tienen la sartén por el mango para arreglar sus errores. Pero no será tarea fácil ya que se enfrentan a un problema al que la sociedad nunca se ha enfrentado. Los legisladores buscan a palos de ciego una solución a estos problemas. «En otras grandes empresas tecnológicas como Google, cualquier investigador independiente puede descargar de Internet los resultados de las búsquedas de la empresa y escribir artículos sobre lo que encuentra», declaró Haugen. «Pero Facebook se esconde detrás de muros que impiden a los investigadores y a los reguladores comprender la verdadera dinámica de su sistema».