Internacional

Rodrigo Duterte, Presidente de Filipinas, vuelve a protagonizar unas controvertidas declaraciones comparándose con Hitler

El presidente de Filipinas llama “hijo de …” a Barack Obama

Rodrigo Duterte, Presidente de Filipinas, parece estar empeñado en darse a conocer mediante declaraciones, cuando menos, comprometidas. En esta ocasión, sus declaraciones en referencia a la lucha contra las drogas en el país que gobierna han hecho saltar la alarma.

«Si Hitler Masacró a millones de judíos, ahora, en mi país hay tres millones de adictos a las drogas. Me gustaría masacrarlos a todos», ha dicho Duterte sin impresionar demasiado dado su historial de declaraciones similares.

La comunidad internacional lleva tiempo mostrando su preocupación. Denuncia los métodos fuera del círculo de la legalidad del Presidente Filipino. Y precisamente, refiréndose a Estados Unidos y la Unión Europea: «No me podéis llamar nada, no soy hipócrita como vosotros.» Duterte, desahogado, se marcha con este saludo. Desde que llegó a la presidencia han muerto más de 3.000 traficantes y drogodependientes en operaciones policiales.  Un balance que deja unas escalofriantes estadísticas de mil muertos por cada mes de mandato.

Ya a mediados de este mes, Duterte se veía envuelto en una nueva polémica tras las acusaciones vertidas por un exsicario sobre el presunto encargo de asesinato de rivales políticos cuando era alcalde en la ciudad de Davao. «Nuestro trabajo era matar a criminales como vendedores de drogas, violadores o ladrones», reconocía Edgar Matobato, de 57 años y exmiembro de los «escuadrones de la muerte» en su declaración durante una comisión de investigación del Senado.

Insulto a Obama

El Presidente filipino ya protagonizó un episodio similar cuando llamó «hijo de puta» a Barack Obama, Presidente de los Estados Unidos. Lo hizo respondiendo a preguntas de los periodistas, al sentirse cuestionado por Estados Unidos por supuestos crímenes dirigidos desde el gobierno como política contra los narcotraficantes.

Si llamativas son las declaraciones, o más bien el insulto, no menos lo es la disculpa. En un comunicado, el equipo de Duterte lamenta que se hayan tomado “como un ataque personal” y generado “tal controversia”.

El dirigente llegó al poder el pasado 30 de junio y sólo desde esa fecha, en poco más de dos meses, 2.400 personas han muerto en operativos antidroga de la policía, una media de 40 al día.

Como era de esperar, la Casa Blanca ha cancelado un encuentro previsto entre ambos mandatarios y las relaciones quedan rotas.