Internacional

Massa ‘olvida’ que es ministro kirchnerista: «Quiero hacer un Gobierno de unidad no adscrito a partidos»

Serio, mirando al infinito, como si quisiera demostrar que no es el momento de celebrar su indudable buen resultado, compareció Sergio Massa tras confirmarse que ha sido el candidato más votado en esta primera vuelta y se jugará el poder con el liberal Javier Milei. El peronista sigue esforzándose en mostrar una imagen presidencialista, como si fuera el candidato capaz unir a los argentinos de uno y otro signo… O dicho de otra forma, como si no fuera el ministro de Economía del actual Gobierno kirchnerista que ha sumido al país en una nueva y profunda crisis y que tiene disparada la inflación.

Entre gritos de la enfervorizada hinchada peronista, Massa, sin abandonar su rictus de seriedad, comenzó su alocución pidiendo «que tomemos este tiempo como un tiempo de reflexión para hacer los agradecimientos a los que esta noche nos obliga», comenzando por «los más de 25 millones de argentinos que fueron a votar, votaran a quien votaran», recordando los 40 años de democracia en la nación. Es decir, volviendo a poner la dictadura sobre la mesa aun sin nombrarla.

Hizo hincapié en los «15 puntos que hemos crecido desde las primarias» que se celebraron en Argentina el pasado mes de agosto. Reconoció que «hoy nuestro país vive una situación compleja, lleno de desafíos», lo que no fue óbice para que sus votantes «crean que somos la herramienta para enfrentarnos a ellos».

«Sé que muchos de los que nos votaron son los que más están sufriendo. No les voy a fallar», aseguró», «como presidente desde el 10 de diciembre no les voy a fallar», aventuró el candidato peronismo, quien también se dirigió a «los que votaron en blanco, a los que a lo mejor, con desesperanza o con bronca, se quedaron en su casa, a los que eligieron a Myriam, a los que votaron a Juan, a los miles y miles de radicales con los que compartimos valores, pero también a aquellos que eligieron otra opción pensando en la necesidad de tener una Argentina en paz». Este fue el llamamiento de Massa a los votantes de otros partidos, sin mayores alharacas: «Voy a hacer un esfuerzo para ganarme su confianza».

Prometió que «a partir del 10 de diciembre voy a convocar un gobierno de unidad nacional, convocando a los mejores y no de forma partitocrática. Vamos a construir una industria argentina fuerte, frente a aquellos que plantean la apertura indiscriminada de las importacionaes».

Presumió de que «he recibido a lo largo de la tarde el llamado de numerosos presidentes de otros países que miraban con interés y que saben que queremos una Argentina integrada, que mira por el multilateralismo y que somos garantía de seriedad a la hora de establecer relaciones, y les transmití mi convicción de que ese país es el país que vamos a construir en mi gobierno».