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Juicio por violación en Francia: uno de los acusados hacía lo mismo a su mujer tras ‘aprender’ de Pélicot

Jean-Pierre Maréchal copió a 'su maestro' Dominique e hizo con su mujer lo mismo que con Gisèle: la violaron hasta 12 veces

Uno de los más de 50 acusados en el juicio por violación en Aviñón (Francia) que ha conmocionado a medio mundo hizo a su vez con su esposa lo mismo que el principal acusado, Dominique Pélicot, con la víctima, Gisèle Pélicot. Al parecer, Jean-Pierre Maréchal, de 63 años, sedaba también a su pareja para abusar de ella, algo que no habría ocurrido, según el testimonio de una de las hijas de ambos, si Jean-Pierre Maréchal no hubiese conocido a Dominique Pélicot, que suministraba ansiolíticos a Gisèle Pélicot para que otros hombres la violaran cuando ella estaba inconsciente.

Jean-Pierre Maréchal, que en ese momento tenía 53 años, no desmiente el testimonio de su mujer y entiende que merece ser condenado a cadena perpetua, como admitió al principio del proceso judicial que se está desarrollando en Francia desde el 2 de septiembre y que se extenderá hasta una o dos semanas antes de que comience la Navidad. Sin embargo, intenta que se entienda su comportamiento como el resultado del trauma tras haber sido víctima, él mismo, de violación y abusos y haber vivido en el seno de una familia en el que la madre era alcohólica y el padre maltratador. Este relato podría ser un atenuante para el imputado.

La hija de Jean-Pierre Maréchal, pese a atribuir el comportamiento delictivo de su padre a la influencia que ejercía sobre éste el principal acusado, ha tachado de «imperdonable» lo que hizo a su madre, como ha subrayado este miércoles ante el Tribunal de lo Criminal de Vauclause, donde también ha confesado no entender nada. Utilizó también ansiolíticos para dejarla sin voluntad, dado que «aprendió» del principal acusado como si de un alumno se tratara, e incluso éste le facilitó los fármacos.

De hecho, fue Dominique Pélicot el que convenció a Jean-Pierre Maréchal de que aplicara su método con su mujer, a la que también él violó. Lo hicieron juntos hasta en 12 ocasiones. Ella ha decidido no denunciarlo, pero sí que ha testificado en la audiencia de este miércoles.

La víctima se despertó

La violaron sin que fuera consciente, hasta una noche de junio de 2020. La víctima se despertó justo cuando la estaban agrediendo. Fue capaz, aunque con dificultad, de distinguir a otro hombre presente en la habitación, aunque Pélicot huyó y su marido se inventó que había estado allí porque quería ver la ropa interior de él, algo que justificó aludiendo a su bisexualidad. No lo creyó, pero tampoco fue capaz de imaginar la realidad. Al igual que sus hijos, la descubrió cuando la policía se presentó en su casa para detenerlo y cuando supo que entre las fotos que habían encontrado en el ordenador de Pélicot se encontraban también decenas de imágenes de ella desnuda en su cama.

Los dos acusados en cuestión se conocieron en un foro de encuentros sexuales, clausurado por la policía el pasado mes de junio. El contacto con Pélicot habría hecho, según su defensa, que el trauma de Maréchal explotara y que fuese más vulnerable para ser manipulado por el primero.

El juicio, que arrancó a principios de este mes de septiembre en Francia, ha levantado gran expectación en todo el mundo, no sólo por lo insólito del caso, sino también por la decisión de la víctima: Gisèle Pélicot pidió que se celebrara a puerta abierta para exponer a los más de 50 imputados -los hombres que aparecen en los vídeos que han podido ser identificados- a la prensa y la opinión pública e intentar así que los acusados se avergonzaran o, como dijo su abogado, «para que la vergüenza cambiara de bando».

Dominique Pélicot drogó a su mujer durante una década y la entregó a más de 50 hombres para que la violaran en su habitación, en su domicilio de Mazan, al sur de Francia. Fue detenido en septiembre de 2020 por grabar bajo las faldas de las mujeres en un supermercado. A raíz de ese arresto, la policía descubrió cientos de fotos y vídeos en su poder en las que se veía a decenas de hombres abusando de su mujer drogada.

El principal acusado no ha acudido aún a ninguna de las audiencias del juicio por enfermedad. Se encuentra hospitalizado por complicaciones renales, por lo que su comparecencia se ha retrasado y, en principio, testificará el próximo lunes. Los hijos que tiene en común con la víctima han decidido no declarar hasta que su padre no esté presente en la sala, dado que quieren forzarlo a escuchar lo que tienen que decir.