Internacional

El Gobierno trabaja para aclarar cuanto antes la situación del barco de Proactiva Open Arms retenido en Sicilia

El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, ha asegurado que el Gobierno está trabajando sin descanso para «aclarar» la situación del barco de la ONG catalana ‘Proactiva Open Arms’ retenido en Sicilia. El ministro ha comentado que su labor se centra en «intentar despejar cualquier problema que haya» con el barco que se enfrentó a patrulleras libias y se negó a entregarles los inmigrantes que habían rescatado en el agua.

«Tenemos desde ayer al Consulado en Nápoles y al cónsul honorario en Catania, en contacto con el capitán del barco y con los responsables de la ONG que ya tienen una abogada, entiendo, allí y están trabajando conjuntamente para aclarar los extremos de las acusaciones e intentar despejar cualquier problema que haya», ha afirmado a los medios antes de participar en la reunión de ministros de Exteriores de la UE en Bruselas.

Preguntado por si el Gobierno entiende que hay una justificación que explique que se haya retenido al barco, Dastis ha afirmado que el Ejecutivo «no entiende nada» hasta que no se aclare «de qué se les acusa y cuál es la justificación para esas acusaciones».

«Toma del barco preventiva»

El fundador de Proactiva Open Arms, Oscar Camps, ha explicado este lunes que el barco de la ONG sigue retenido en un puerto de la isla italiana de Sicilia, donde llegó el fin de semana tras rescatar a 218 inmigrantes que se encontraban a la deriva en el Mar Mediterráneo. «Estamos en una situación de toma del barco preventiva», ha relatado en declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Europa Press, y ha añadido que prevén que se les acuse de un delito al haber trasladado al grupo de migrantes desde aguas libias hasta territorio italiano.

«Hicimos la intervención en el mar y, una vez rescatados, pusimos rumbo al norte, hacia Italia, como hacemos siempre, e Italia no nos permitió la entrada» y obligó a que España tuviera que solicitar la entrada del barco a un puerto italiano.

«Nos trasladaron a un protocolo que no se había usado nunca», ha lamentado, por lo que tuvieron que contactar con el Ministerio de Asuntos Exteriores español y explicar que tenían una situación grave a bordo para que realizara el trámite.