Internacional

El enésimo gatillazo: las encuestas son una chapuza

  • Juanan Jiménez
  • Especializado en información nacional e internacional, breaking news, periodismo de datos y visualización, también escribo sobre motor y tecnología.

Las encuestas que vaticinaron una victoria de Hillary Clinton han fallado de plano. Donald Trump, al que todos los estudios demoscópidos hundieron tras los tres debates contra la candidata republicana ha ganado las elecciones presidenciales en Estados Unidos.

Ya pasó con el Brexit, con las elecciones españolas, en el plebiscito por la paz en Colombia y en las elecciones del Reino Unido en 2015. Una cosa es la opinión que recogen los encuestadores y otra muy distinta lo que los votantes hacen el día que tienen que depositar su papeleta.

Donald Trump llegaba defenestrado a la recta final de la campaña electoral en Estados Unidos. Los tres debates contra Clinton y los escándalos en torno a su persona le habían convertido en un pelele y todos los grandes gurús vaticinaban que Hillary tenía más de un 70% de posibilidades de convertirse en la primera mujer en ocupar el despacho oval de la Casa Blanca.

Sólo el escándalo de los emails con información sensible que la ex secretaria de Estado almacenaba en servidores privados, ‘rescatado’ en la última semana de campaña por el FBI dio un vuelco a las encuestas y permitió a Trump acercarse en las estimaciones de intención de voto a su rival demócrata. Ni una sola vez el excéntrico millonario estuvo por delante de Clinton.

Ni ‘sorpasso’ ni debacle del PP

Un caso similar sucedió en el caso de las elecciones en España el 26J. En las semanas previas a la cita electoral, todas las empresas de demoscopia auguraban el famoso sorpasso de Unidos Podemos al PSOE y otorgaban al PP un resultado muy inferior al que lograron. Los sondeos llegaron a predecir para la formación de Rajoy hasta 24 escaños menos de los logrados.

Una encuesta de IMOP para Llorente & Cuenca y publicada el 19 de enero predecía que el PP obtendría 136 escaños, uno menos que los logrados el 26J. Hecha medio año antes de los comicios, fue la que más se acercó a los resultados electorales. A Ciudadanos le atribuía 29 asientos en el Congreso, dos menos de los que ha logrado. Sin embargo, con el PSOE y el Podemos falló. Al partido de Pedro Sánchez le otorgaba 96 representantes, muy por encima de los 85 que lograron, mientras que para la formación morada predecía 63, ocho menos que los que finalmente logró.

A pesar de sus equivocaciones con respecto a PSOE y Podemos no es, ni de lejos, la encuesta que más se alejó de los resultados finales. De hecho, cuanto más cercanos eran los sondeos a las elecciones generales más fallaron las predicciones.

El 3 de junio La Razón publicaba la primera encuesta en la que se predecía el inexistente sorpasso de Unidos Podemos al PSOE. El sondeo, realizado por NC Report, otorgaba al PSOE una horquilla entre 80 y 84 escaños y a la coalición de Pablo Iglesias y Alberto Garzón una de entre 80 y 84 asientos. El sondeo infravaloraba las opciones del PP hasta una cifra que oscilaba entre 125 y 130 representantes y predecía para Ciudadanos un resultado de entre 37 y 39 diputados.

Un día después, El Español ampliaba la supuesta ventaja de Unidos Podemos sobre el PSOE, al predecir que obtendrían 86 y 82 escaños respectivamente. Al PP le auguraba un hundimiento hasta 113 diputados, 24 menos de los que lograron, y a Ciudadanos un crecimiento que le colocaría en 44 representantes.

La encuesta oficial del CIS el 9 de junio no hizo sino profundizar en el fallo demoscópico. Además de otorgar al PP tan sólo entre 118 y 121 escaños, ampliaba la supuesta ventaja de Unidos Podemos sobre el PSOE. A los de Pablo Iglesias le predecía entre 88 y 92 escaños y al partido de la calle Ferraz entre 78 y 80.

Con el arranque de la campaña electoral, las cosas no cambiaron a mejor. Ningún sondeo otorgaba al PP más de 130 escaños, y casi todos se situaban muy por debajo de esa cifra. El caso extremo es el de Metroscopia para El País publicado el día 18. Predecía que la formación de Rajoy lograría 114 diputados y Unidos Podemos 93. Curiosamente, sí se acercó a los resultados del PSOE, al otorgarle tan sólo tres menos de los que ha obtenido. Para Ciudadanos predecía ocho representantes más de los logrados.

Apostaron por el ‘sí’ al acuerdo de paz en Colombia

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, estaba confiado en que los colombianos votarían en favor del acuerdo de paz firmado con las FARC para acabar con más de 50 años de conflicto. A cinco días del plebiscito, la consultora Datexco auguraba que el 55% de los votantes refrendarían el acuerdo firmado en La Habana, mientras que sólo el 36,6% se decantarían por el ‘no’.

La victoria del ‘no’ con un 50,21% frente al 49,78% de los partidarios del ‘sí’ supuso toda una sorpresa no sólo para la opinión pública colombiana sino para todo el mundo, que esperaba un voto afirmativo por la mayoría de la población en Colombia.

El Brexit, otro nuevo fiasco

Los fallos demoscópicos se reprodujeron de nuevo en el caso del referéndum que votaron los ingleses para abandonar o permanecer en la Unión Europea. La mayoría daban una ventaja suficiente a la permanencia en la UE y pocas se atrevieron a vaticinar el Brexit.

En la última semana antes del referéndum algunos estudios daban un 55% de opciones a la permanencia, mientras que el Brexit sólo había calado entre el 45% de los votantes, según un estudio por Populous.

Dialy Mail y la cadena de televisión ITV auguraban, según datos de ComRes, una cómoda ventaja a no abandonar la UE con 48% frente al 42% partidario del Brexit.

Otro sondeo de YouGov daba un margen mucho más estrecho, al adjudicar a la permanencia un 51 % del apoyo, frente al 49 % que recibe el Brexit.

Sólo los datos de la prestigiosa firma TNS otorgaban al Brexit un respaldo mayoritario con un 43%, frente al 41% de los partidario de seguir en la Unión Europea.

Nadie acertó con la mayoría de Cameron

Los encuestadores ingleses sufrieron un duro varapalo en su prestigio cuando ninguna de las empresas más importantes como YouGov, TNS, ICM o Survation, entre otras, no acertaron con la mayoría absoluta del conservador David Cameron en las elecciones de 2015.

Todos los estudios de intención de voto arrojaban un resultado muy ajustado entre laboristas y tories. Sin embargo, David Cameron ganó con una mayoría aplastante. Todos sus rivales dimitieron tras la derrota.

“Los encuestadores deberían sondearse entre sí para ver lo que no ha funcionado” resumió, con su sarcasmo habitual, el alcalde conservador de Londres, Boris Johnson.

Cuando llegaron los primeros sondeos a pie de urna todos se llevaron las manos a la cabeza. Nada menos que 77 escaños de ventaja para los conservadores. “Si esas estimaciones son exactas, estoy dispuesto a comerme mi sombrero en público” destacó Paddy Ashdown, el ex patrón de los demoliberales, completamente desorientado.

“Estoy perplejo”, reaccionó Peter Kellner, el presidente de YouGov que, según el diario sensacionalista The Sun, había incluso vuelto a encuestar a 6.000 personas el jueves a la salida de las urnas, para confirmar luego el empate (34% para los conservadores y la misma cifra para los laboristas) . “La noche no fue formidable ni para los encuestadores ni para los analistas. Se solicita autopsia” tuiteó Lord Michael Aschcroft, un millonario especialista en sondeos locales.