Internacional

El FBI accede al iPhone del autor de 14 muertes en San Bernardino sin ayuda de Apple

El FBI anunció este lunes haber sido capaz de desbloquear el iPhone de uno de los autores de la matanza de San Bernardino, por lo que pidió a la justicia anular la orden de ayuda a Apple tras semanas de conflicto.

«Nuestra decisión de poner fin al litigio está basada en el solo hecho de que, con la asistencia de una tercera parte, hemos sido capaces de desbloquear el iPhone sin comprometer la información que contiene el teléfono», explicó la fiscal Eileen Decker en un comunicado.

Hace justo una semana, el gobierno estadounidense pidió cancelar una audiencia con Apple en los juzgados de Riverside, al este de Los Ángeles, al alegar que un tercer actor había mostrado al FBI un posible método para entrar en el teléfono de Syed Farook. Entonces pidió tiempo para «garantizar» que el sistema no destruiría los datos del aparato.

«Aunque hemos logrado dar este paso en la investigación» sin Apple, prosiguió Decker, «seguiremos explorando cada vía e indagando cada proceso legal para asegurar que nuestra investigación recoge todas las evidencias relacionadas con este ataque terrorista».

El FBI no ha revelado quién le ha ayudado para entrar en el aparato, pero varios medios de comunicación apuntan a que se trata de una empresa israelí.

Farook y su esposa, Tashfeen Malik, mataron el 2 de diciembre del año pasado en San Bernardino, también al este de Los Ángeles, a 14 personas e hirieron a varias decenas en el peor atentado que sufrió Estados Unidos desde el 11 de septiembre de 2001.

El FBI aseguró desde el principio que el teléfono celular del hombre podía contener información clave para entender los motivos de la matanza, por lo que reclamó la ayuda de Apple.

Defensa de la privacidad

Pero el gigante informático se negó a crear un software especial, afirmando que este hecho crearía un peligroso antecedente y pondría en jaque la privacidad de los usuarios. «Necesitamos decidir como nación cuánto poder debe tener el gobierno sobre nuestros datos y nuestra privacidad», dijo el lunes pasado el director general de la compañía, Tim Cook.

Otras empresas tecnológicas de Silicon Valley como Google, Facebook y Yahoo! respaldaron la decisión de Apple de no colaborar.

«Es una orden limitada, con un objetivo específico (…) El gobierno y la población tienen que saber lo que contiene el teléfono del terrorista, y el gobierno necesita la ayuda de Apple para descubrirlo», justificó la semana pasada el Departamento de Justicia (DoJ).

La decisión de las autoridades estadounidenses de anular la vista de la semana pasada ya fue aplaudida por el sector tecnológico como una victoria para Apple.

El Centro para la Democracia y la Tecnología (CDT, en inglés) afirmó entonces que este caso siempre ha sido «el intento del gobierno para imponer ‘puertas traseras’ que rebajarían la seguridad de todos los estadounidenses».

El director adjunto para temas globales de Amnistía Internacional, Sherif Elsayed-Ali, alertó de su lado que «los gobiernos que intentan quitar importancia a la codificación deberían pensárselo dos veces antes de abrir la caja de Pandora».

«Debilitar la privacidad digital podría tener consecuencias desastrosas en sociedades libres, sobre todo para activistas de derechos humanos y periodistas», afirmó.