Internacional

Clamoroso silencio de Podemos tras condenar a muerte Irán a dos mujeres activistas LGTBI

Podemos vuelve a callar ante un clamoroso pisoteo de los derechos humanos en Irán. Este lunes, un tribunal iraní ha condenado a muerte a dos mujeres acusadas de tráfico de personas, en un proceso que, según una denuncia una ONG, guarda relación en realidad con el activismo de ambas en favor de los derechos de la comunidad LGTBI. Una vez más los responsables de Podemos permanecen callados ante los atropellos que comete el régimen represor de los ayatolás. ¿Por qué? A lo mejor esto lo explica: Recientemente, el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Seplac) informó a la Policía en tres ocasiones (años 2013, 2017 y 2018) sobre los vínculos de empresas sospechosas de lavado de dinero procedentes de Irán con la productora en la que trabajaba (y de la que cobraba) el ex vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias.

La empresa no es otra que 360 Global Media, que produce programas como La Tuerka o Fort Apache, presentados por el ex íder de Podemos, Pablo Iglesias, y que contaba con la presencia en ocasiones de personas de su entorno, como el cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero.

La sentencia de muerte de Irán contra las dos mujeres activistas LGTBI, que no ha condenado Podemos, fue dictada por un tribunal de la ciudad de Urmía, en el noroeste de Irán, e incluye también entre los delitos «corrupción en la tierra», según informó la agencia Irna. Se trata de un cargo ambiguo utilizado contra personas sospechosas de violar la integridad del Estado o de actuar contra la moralidad pública, entre otras actividades presuntamente delictivas.

La ONG Hengaw Organization for Human Rights ha asegurado que las dos mujeres, identificadas como Zahra Sedighi, de 31 años, y Elham Chubdar, de 24, fueron detenidas en realidad por reclamar más derechos para la población LGTBI en un país donde la homosexualidad sigue siendo ilegal, susceptible incluso de la pena de muerte,

También Amnistía Internacional alertó en enero de la situación de Sedighi, advirtiendo de que había sido detenida de forma arbitraria y sólo por su supuesta orientación sexual. Según esta organización, fue arrestada tras aparecer en un documental de la BBC sobre la población LGTBI en el Kurdistán iraní.

La agencia oficial no ha aludido a su orientación sexual al informar de la condena, aunque la televisión estatal sí que ha descrito a Sedighi como una madre de dos hijos que quería «romper el tabú de la homosexualidad» y que ayudaba a trasladar a mujeres a Irak para ser «vendidas en discotecas», informa la agencia Bloomberg.