¿Cómo se hace?
Cocinas

Los trucos para minimizar riesgos en tu cocina de gas

Los chefs internacionales de mayor prestigio aseguran que el gas es la mejor forma de cocción posible en casa. Claro que estos aparatos también pueden ser más peligrosos que otros y por eso es indispensable que sepas cómo minimizar riesgos en tu cocina de gas, evitando diversos accidentes que causen daños leves o graves.

Regina LaRocque, profesora de la Facultad de Medicina de Harvard, realizó un informe reciente en el que aborda esta problemática ofreciendo ciertas recomendaciones para las personas que usan cocinas de gas en su hogar. Esta investigación, difundida por ProPública, habla de cuidados frente a la contaminación y otras cuestiones.

Trucos para minimizar riesgos en tu cocina de gas

Si echamos un vistazo a las estadísticas que dicen que cerca del 13% de los casos de asma infantil en los EE.UU. fue provocado por la liberación de dióxido de nitrógeno y monóxido de carbono de las cocinas de gas, entonces podemos coincidir en que hace falta educación sobre el uso de estos electrodomésticos y sus consecuencias.

Entre los principales peligros a los que estamos expuestos aparecen las fugas de gases tóxicos, las explosiones, los inconvenientes respiratorios y la adsorción de benceno, un carcinógeno que puede devenir en leucemia.

¿Cómo protegerte si tienes una cocina de gas?

Para evitar estos riesgos y otros menos comunes, Regina LaRocque brinda algunos consejos simples pero útiles. Por ejemplo, que siempre cocinemos en los hornillos de atrás o que mantengamos la campana extractora activa. Sugiere que la cocina permanezca ventilada hasta un par de horas tras utilizarla y más allá del tipo de uso.

Una buena noticia para quienes viven en edificios es que, por la altura a la que se encuentran, pueden deshacerse rápidamente de los gases contaminantes. Solamente deben abrir las ventanas y esperar a que éstos se disipen. Cuanto menos viento hay y más alta es la temperatura, más rápidamente desaparecerán esos gases nocivos.

Si vives en los primeros pisos de estas edificaciones, lo conveniente es que te ayudes de un ventilador. Ponlo mirando hacia la ventana y cruzando la cocina, de modo que se lleve los gases perjudiciales al exterior.

Revisa las instalaciones regularmente

Por último, pero no por eso menos importante, haz revisar con regularidad todas las instalaciones de tu cocina. Contrata a un profesional para que se encargue de ello y de los problemas que pudieran ser necesarias.

Detectada cualquier anomalía, no dudes en consultar a un profesional experto para que pueda darte una mano.