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‘Tierra amarga’, capítulo 141: descubrimos el final de los personajes principales

  • Laura Hernández
  • Periodista. Redactora de Happy FM. Pendiente de los nuevos éxitos musicales, los salseos en realities, los dramas de las series turcas, ¡y del Benidorm Fest & Eurovisión!

Tierra amarga, con el paso del tiempo, ha sabido hacerse un hueco en los corazones de miles de personas en nuestro país. Y siendo honestos, no es para menos. Es más que evidente que cada vez son más las personas que no se pierden una sola entrega, ya sea en Antena 3 o en ATRESplayer Premium.

Recientemente hemos podido disfrutar del capítulo 140 de Tierra amarga. Así pues, somos testigos del entierro de Hakan, al que Züleyha acude junto a Fikret. Sermin se queda completamente sola ante el peligro, por lo que el fiscal le aconseja que declare en contra de su hija para poder rebajar su pena.

Betül encuentra dos aliados: Abdülkadir y Vahap. Los tres empiezan a trazar un plan para salir del país lo antes posible. En plena frontera, han sido parados por la policía. Fikret toma la decisión de sorprender, como nunca, a Zeynep. Y lo hace con una cena romántica, para pedirle matrimonio.

Lo mismo ocurre, minutos después, con Abdülkadir. En la frontera con Turquía, les dan la opción de elegir en qué país entregarse. Finalmente, los dos regresan a Çukurova junto a Züleyha, Fikret, Çetin y el resto de sus hombres. Çolak, que había sido detenido, es condenado a cadena perpetua. Lo mismo ocurre con Betül y Abdülkadir.

En la celebración de la boda de Fikret y Zeynep, Vahap aparece de un instante a otro. Y lo hace con varios artefactos pegados a su cuerpo. Su objetivo era atentar contra ellos, pero afortunadamente no lo logra. Acto seguido, conocemos el futuro de todos y cada uno de los personajes principales.

Betül, tras 25 años en prisión, logró salir y jamás se supo nada de ella mientras que Sermin sufrió un infarto mientras trabajaba como limpiadora. Çolak desarrolló diabetes en prisión, y murió. Abdülkadir, por su parte, fue asesinado entre rejas tras una fortísima pelea entre encarcelados. Hammine murió a los 109 años, siendo una de las personas más longevas de la historia de Turquía.

No podemos olvidar mencionar Yilmaz Adnan Yaman, el hijo de Züleyha y Yilmaz, los verdaderos protagonistas de la historia. El joven se encargó de recopilar toda la historia de su familia, centrándose en su madre, para reflejarla en la pequeña pantalla. Una historia que merecía ser contada y que ha marcado para siempre a toda una generación. Un final a la altura de lo que se esperaba. ¡Hasta siempre, Tierra amarga!