España

El separatismo pincha: 300.000 personas, muy lejos de las expectativas y de anteriores manifestaciones

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, encabeza junto al presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent, la manifestación independentista que se celebra este domingo en Barcelona. La primera edil de la ciudad condal y la máxima autoridad institucional en Cataluña se ponen al frente, así, de la manifestación que clama por la libertad de los líderes independentistas responsable del 1-O que se encuentran en prisión o fugados fuera del país.

También participan en la marcha el ex conseller Carles Mundó; la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie; el portavoz de Òmnium, Marcel Mauri; el secretario general de UGT en Cataluña, Camil Ros, y el líder de CCOO en la comunidad, Javier Pacheco.

El presidente del Parlament, Roger Torrent.

La manifestación ha dado comienzo a las 12.30 en la Plaza España de Barcelona y recorrió toda la avenida del Paralelo. La Asamblea Nacional Catalana, Òmnium Cultural y los CDR han organizado más de 900 autocares para desplazar a miles de personas desde diferentes puntos de Cataluña hasta Barcelona, para poder participar en la manifestación. El ayuntamiento de Barcelona también ha reforzado el servicio de metro y ha modificado el de autobuses por el paso de la marcha.

Unas 300.000 personas, según la Guardia Urbana, participan en la marcha convocada por la plataforma «Espai Democràcia i Convivència», para reclamar la libertad de los presos separatistas encarcelados y que se busquen «espacios para el diálogo y la negociación política» para abordar la crisis catalana.

Convocada bajo el lema «Por los derechos y las libertades, por la democracia y la cohesión, os queremos en casa», la manifestación coincide con los seis meses del encarcelamiento de los líderes independentistas Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural, y Jordi Sànchez, expresidente de la Assemblea Nacional Catalana y actual diputado de JxCat.

El ex conseller Carles Mundó.

La plataforma «Espai Democràcia i Convivència» está integrada por diversas entidades, asociaciones y sindicatos, entre ellos CCOO y UGT, que consideran que «los problemas políticos deben tener una respuesta política y no represiva» y piden a las instituciones catalanas, españolas y europeas que busquen espacios para el diálogo y la negociación política».

La movilización llega en un momento de especial trascendencia en el independentismo. A pocas horas de que Carles Puigdemont hable por primera vez desde su salida de prisión, de que el juez Pablo Llarena rechazara la asistencia de Jordi Sánchez al pleno de investidura y de que Torrent decidiese querellarse contra él en nombre del Parlament.