España

El Supremo espera que el tribunal Alemán decida sobre la entrega de Puigdemont este mismo mes

El Tribunal Supremo espera que la justicia alemana emita su resolución definitiva sobre la entrega del expresidente catalán, Carles Puigdemont, a España por presuntos delitos de rebelión y malversación de fondos públicos en este mes de junio.

Según las fuentes consultadas por OKDIARIO, el Tribunal Supremo y la Fiscalía española confían en que la contestación a la Orden Europea de Detención y Entrega OEDE se haga efectiva en estas próximas semanas, ya que a finales de junio expira el plazo previsto. No obstante, en ocasiones anteriores la justicia alemana ha prorrogado el plazo para resolver la OEDE del expresidente catalán fugado desde noviembre. Dicha orden de entrega fue cursada por el magistrado del Tribunal Supremo, Pablo Llarena.

La Fiscalía alemana de Schleswig-Holstein solicitaba la semana pasada la entrega de Puigdemont por los citados delitos. “A pesar de las decisiones parcialmente contrarias del Tribunal Regional de Schleswig-Holstein, la Fiscalía General mantiene su parecer en cuanto a que (Puigdemont) puede ser extraditado tanto por la acusación de rebelión como de malversación de caudales públicos interpuesta por las autoridades españolas”, sostenía en un comunicado el Ministerio Público alemán.

“El material facilitado a posteriori por las autoridades españolas no es contradictorio, sino que prueba de forma manifiesta la dimensión de los enfrentamientos violentos ocurridos en Cataluña el día del referéndum y que (también) son atribuibles al acusado”, agregaba el escrito.

De esta manera, la Fiscalía germana realizaba esta petición por segunda vez desde que el tribunal alemán de la región Schleswig-Holstein rechazara inicialmente a principios de abril el delito de rebelión al considerar que durante el golpe independentista no hubo “suficiente violencia”. 

El propio Llarena enviaba el 17 de mayo una carta a la fiscal jefe del tribunal alemán de Schleswig-Holstein para advertirle de que el auto de procesamiento que dictó contra éste y otros investigados en esta causa que sustenta la euroorden (OEDE) es equiparable a una orden de detención y por lo tanto cumple con los requisitos exigidos en este procedimiento, al contrario de lo expresado por las autoridades belgas.

La fuga de Puigdemont y de los otros seis dirigentes independentistas catalanes, Meritxel SerretToni Comín y Lluís Puig (Bélgica), Clara Ponsatí (Escocia), Anna Gabriel y Marta Rovira (Suiza), no paralizará el enjuiciamiento del resto de los golpistas que se han puesto a disposición judicial. Con este objetivo, el magistrado Llarena abría una pieza separada en la causa.

El resto de procesados en la causa Oriol JunquerasJordi TurullJosep RullRaül Romeva, Joaquim FornJordi SànchezJordi CuixartDolors Bassa y Carme ForcadellLluís María CorominasLluís GuinóAnna SimóRamona Barrufet, Joan Josep NuetMeritxell Borrás, Carles Mundó, Santi Vila y Mireia Boya podrían ser juzgados a finales de año.

Concretamente, la Fiscalía y el Supremo quieren celebrar la vista oral entre octubre y noviembre con el objetivo de que haya sentencia a finales de año o a principios de 2019. A pesar de todo, la resolución del tribunal alemán de Schleswig-Holstein podría no ser el punto y final de este culebrón judicial, ya que previsiblemente su decisión se podría recurrir ante el Tribunal Federal de Justicia de Alemania.

Sede del Tribunal Supremo, en Madrid. (Kris Arnold / Flickr)

El Plan B del Supremo

Tal y como avanzaba este diario, el Tribunal Supremo se plantea renunciar a seguir solicitando nuevas euroordenes contra los responsables del golpismo catalán fugados si la justicia alemana rechaza finalmente la entrega del ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, por delitos de rebelión y malversación.

El escepticismo sobre la cooperación y colaboración de la Justicia europea en la entrega de los independentistas procesados se ha apoderado del Alto Tribunal. Un escepticismo alimentado por los últimos capítulos protagonizados por la Justicia belga, la alemana y la Suiza. El objetivo del Supremo al renunciar a las OEDE es evitar alimentar el falso discurso propagado por los independentistas fugados de que Europa les da la razón.