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Sánchez pide alquileres baratos a los caseros mientras él cobra 1.100 € por un piso de 40 metros

Esta vivienda, ubicada en el norte de Madrid, ha sido una fuente de ingresos extra para el presidente

El Gobierno reclama a los propietarios precios "asequibles" y el PP acusa a los socialistas de "vender humo"

El Gobierno de Pedro Sánchez ha pedido a los propietarios que pongan en el mercado viviendas de alquiler «asequible», mientas el líder del PSOE y jefe del Ejecutivo ingresa alrededor de 1.100 euros por un piso de 40 metros cuadrados, según su última declaración de bienes y la información obrante en el Registro de la Propiedad a la que ha tenido acceso OKDIARIO.

La ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, instó a caseros particulares a realizar un aporte al mercado del «95% de las viviendas en alquiler», a cambio de «seguridad jurídica y garantías», declaró. La dirigente socialista hizo tal llamamiento este jueves, tras la reunión que mantuvieron el presidente del Gobierno, la titular de Vivienda y el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, con diferentes actores del sector de la vivienda en Moncloa.

Sin embargo, puede decirse que Sánchez no ha predicado en los últimos años con ese ejemplo de alquileres baratos, máxime cuando él, como casero, ha venido cobrando en torno a 1.100 euros por el alquiler de un piso del que tiene el 100 por 100 de la propiedad y que adquirió en 1992, según indica en su declaración de bienes en el Congreso. Por entonces, el hoy inquilino de la Moncloa apenas tenía 20 años.

OKDIARIO publicó el año pasado los detalles de este arrendamiento de Sánchez, contrastando in situ la documentación oficial recabada procedente del Registro de la Propiedad. Este piso, ubicado en el norte de Madrid, en la zona de Tres Olivos, ha sido una fuente de ingresos extra para Sánchez, porque lo tiene continuamente arrendado. «Ahora lo usa una joven pareja, antes hubo una estudiante que tenía un perro, y antes que ella una mujer», explicó un vecino a este periódico en mayo de 2023.

En la última declaración de bienes y rentas que Sánchez presentó en el Congreso, con fecha del pasado agosto, consta que había percibido por arrendamiento de inmuebles un total de 12.845 euros. Esta vivienda, con una «superficie construida aproximada de cuarenta y un metros ochenta y seis decímetros cuadrados», lleva aparejada una plaza de garaje de 9,90 metros cuadrados útiles. El piso está conformado por «vestíbulo, estar comedor, aseo, cocina y un dormitorio», según el Registro de la Propiedad, que revela la firma de un préstamo hipotecario en su día por valor de 7.291.505 pesetas.

La urbanización en la que se enclava este piso está localizada en un sector residencial de Tres Olivos, en el distrito de Fuencarral-El Pardo, donde el inmueble de Sánchez se «está alquilando por unos 1.100 euros al mes», según apuntaron a OKDIARIO fuentes vecinales al tanto del precio de los arrendamientos de este edificio. Así, indicaron que el precio de este alquiler, que Sánchez gestiona a través de un «intermediario», es de los altos. «Mi hija alquiló otro apartamento igual por 900 euros», relató una de estas fuentes.

El apartamento privativo de Pedro Sánchez está en una quinta planta y da al exterior. Se trata de un residencial que cuenta con conserje, instalaciones que refuerzan la privacidad y la seguridad, y una piscina comunitaria. Esta vivienda la adquirió Sánchez cuando estaba soltero, y años después, ya cuando se había casado con Begoña Gómez, se hizo en 2008 con otro piso en la zona de Aluche (Madrid) siendo entonces concejal en el Ayuntamiento de la capital y miembro de la Asamblea General de Caja Madrid. Esto le permitió acceder a una polémica hipoteca de interés reducido.

Ambas viviendas, la de Aluche y la de Tres Olivos, son las dos únicas que declara Sánchez en la ficha del Congreso de los Diputados. Respecto al vistoso piso de 165 metros cuadrados construidos de Pozuelo de Alarcón (Madrid), donde Sánchez y su esposa vivían antes de residir en la Moncloa, éste fue una compra de su suegro, Sabiniano Gómez, que regentó un negocio de saunas gay. En los últimos años, esta casa familiar -que Gómez cedió a su hija- también ha estado alquilada.

Un «mitin permanente»

En este contexto, el portavoz nacional del PP, Borja Sémper, denunció este jueves la política de vivienda del Gobierno de Sánchez, ya que los socialistas siempre se sacan un «conejo de la chistera» cada vez que llega un periodo electoral, como hicieron en las últimas elecciones generales, cuando prometieron «construir 185.000, 200.000 ó 250.000 viviendas», recordó.

Ahora, en la antesala de comicios autonómicos en País Vasco y Cataluña, el vicesecretario de Cultura del PP censuró que Sánchez acostumbre en estos periodos a «vender humo». «No da respuestas acertadas para atajar el problema de la vivienda y nos condena a todos a oír un discurso y un mitin permanente, pero no a escuchar ni proponer propuestas contundentes», criticó Sémper en un acto del PP en San Sebastián (Guipúzcoa).

El portavoz nacional de los populares subrayó que el problema de la vivienda «no se soluciona con más intervencionismo», sino «liberando más suelo para construir, aumentando la colaboración público-privada y buscando fórmulas para estimular que los jóvenes tengan acceso a ella».

Este problema, prosiguió, no se resuelve con malas leyes aprobadas de la mano de los proetarras de Bildu, como la que se aplica en el País Vasco, y que ha derivado en la situación actual. «Los que vienen a revolucionar todo, acaban empeorándolo», sentenció Sémper sobre la política de Sánchez y sus socios en materia de alquiler.