Robles sobre Cataluña: «Quieren gestionar la independencia y no logran aprobar sus presupuestos»

La mujer fuerte del PSOE, Margarita Robles, fue la primera en presidir la Audiencia de Barcelona y una de las pocas magistradas, recuerda, que emitió un voto particular para que se procesara a Jordi Pujol. «Lo que pasa es que se envolvió en la bandera y ya pasó a ser un ataque contra Cataluña, claro», cuenta la socialista a OKDIARIO.

P.- ¿Qué ofrece el PSOE en Cataluña?

R.- El PSOE tiene unas prioridades en Cataluña que son la lucha contra la desigualdad, la pobreza y dar soluciones que afectan a muchos ciudadanos por la crisis económica.

P.- Sánchez plasmó en su pacto con Ciudadanos y en su programa del 20D una reforma constitucional para un Estado federal. Iceta, habló de un referéndum ‘a la canadiense’ y en esta campaña Sánchez habla de reconocer los derechos históricos de Cataluña. ¿Dónde está el PSOE?

R.- Sánchez ha sido muy claro diciendo no al referéndum porque no cabe en el reglamento constitucional y en eso no hay ninguna duda. La reforma de la Constitución exige retomar el espíritu de la Transición y retomar las cosas que cada formación dejó aparcadas. Obviamente, eso hay que hacerlo desde la serenidad, el diálogo y el debate.

P.- Entonces, lo de los derechos históricos de Cataluña, ¿exactamente, qué es?

R.- Soy muy rigurosa. Una persona que ha vivido 12 años en Cataluña y que siente el drama que están viviendo. Hay mucho interés por parte de los independentistas en generar una situación enarbolando la bandera del independentismo para no resolver los verdaderos problemas que tiene Cataluña. En estos momentos, la sanidad es muy mala. Han aumentado las listas de espera.

Los mayores de 50 años tienen problemas para encontrar trabajo y hay mucha desesperación en la juventud. Es un poco patético, cómo Junts pel Sí y la CUP son incapaces de aprobar un presupuesto que resuelva los problemas de la ciudadanía. Quieren gestionar un Estado independiente y no son capaces de gestionar sus propios presupuestos. El Gobierno de Rajoy se ha puesto de perfil en todo, y ha echado la patata caliente al Tribunal Constitucional.

P.- En cuanto a Justicia, ¿qué cambios hacen falta en la Fiscalía?

R.- Es imprescindible que la Fiscalía sea un organismo absolutamente independiente en sus actuaciones. La Fiscalía Anticorrupción junto con los jueces están sacando adelante todo el trabajo y la investigación que en otro caso habrían quedado ocultos. Lo están haciendo con falta de medios y con mucha entrega.

P.- Entonces, ¿le parece bien que sea el Gobierno quien elija al Fiscal General del Estado?

R.- Es imprescindible que se modifique el sistema para que el Fiscal General del Estado pueda ser elegido por el Parlamento. Pero me parece más importante que se garantice al máximo la autonomía del Ministerio Fiscal. Estos últimos cuatro años, el Gobierno del PP se ha caracterizado porque todas las leyes que se han dictado en materia de Justicia han sido impuestas por su rodillo sin contar con ninguna fuerza política.

Deberíamos reflexionar por qué en esta legislatura un Fiscal General del Estado con el perfil profesional de Eduardo Torres Dulce ha dimitido. Es algo de lo que se habla muy poco, pero de lo que debería de hablarse mucho. Me parece políticamente relevante saber por qué dimitió y, a partir de ahí, abordar con serenidad qué modelo de Fiscalía queremos.

P.- ¿Por qué cree usted que dimitió?

R.- Tengo mi propia percepción que, obviamente, no la voy a decir porque no la tengo contrastada. Esto tiene que motivar la reflexión del Gobierno y aquí no la ha habido y, ¿saben por qué? Porque la Justicia no le ha importado nada estos cuatro años.

Yo invito a cualquiera a que vaya a ver en qué condiciones trabajan los jueces y juezas en Madrid. Hay unas condiciones absolutamente precarias en las que aparecen ratas entre los expedientes. En estas condiciones, ha habido un Consejero de Justicia de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, sobre el que no voy a hacer ningún comentario porque está en un procedimiento judicial, pero que no parece que se preocupara mucho por sus competencias. Tenemos a unos jueces sobrecargados de trabajo con una ratio de 12 jueces por cada 100.000 habitantes, muy inferior a la que tienen Francia y Alemania.

P.- ¿Le parece bien el sistema de elección de los miembros del CGPJ?

R.- He sido vocal del CGPJ y he sido partidaria de la elección parlamentaria. Pero la experiencia nos demuestra que la imagen de politización de la Justicia no es buena. Es imprescindible que al CGPJ se le dé la vuelta como a un calcetín.

P.- ¿Cuál sería su criterio: una parte elegida por el Parlamento y otra por los jueces?

R.- Hay que distinguir entre los que no son jueces, que tendrían que ir por una elección parlamentaria, y los que lo son, que quizá sirva un mecanismo más razonable como la elección por los propios jueces.