España
INMIGRACIÓN ILEGAL

Récord de fugas de inmigrantes ilegales en el aeropuerto de Barajas: 90 en sólo cinco semanas

Fuga masiva de inmigrantes irregulares en Barajas: 26 en menos de 24 horas

La Policía consigue detener a uno de los huidos

El aeropuerto de Madrid-Barajas bate record de fugas de inmigrantes en situación irregular en España. La Policía ha registrado 90 intentos de fuga en las cinco últimas semanas y decenas de huidos han tenido éxito en su aventura. Sólo entre el jueves y el viernes pasados, 26 inmigrantes registrados como «no admitidos» huyeron de las salas de Barajas donde están confinados fracturando una ventana. La Policía sólo ha conseguido detener a uno de ellos.

La mayoría de los inmigrantes fugados estaban registrados como «inadmitidos», es decir, inmigrantes que han entrado en España de forma ilegal a través del aeropuerto de Madrid-Barajas y están esperando su devolución a sus países de origen. Sólo una pequeña parte son solicitantes de asilo que también son concentrados en las mismas salas del aeródromo madrileño mientras se decide su situación. De esas casi 90 fugas, decenas de inmigrantes en situación irregular consiguieron huir de las salas de acogida, en algunos casos invadiendo las pistas del aeropuerto.

Según el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que lleva meses denunciado la situación de desbordamiento de la inmigración en Barajas, el problema está en la pasividad del Ministerio de Interior y de AENA para resolver la preocupante situación.

En el aeropuerto de Barajas había dos salas para acoger a los inmigrantes que llegan vía aérea a España en situación irregular. La avalancha de inmigrantes ilegales que registra el aérodromo desde el pasado verano es de tal magnitud que hubo que habilitar una tercera sala sólo para mujeres y 19 niños. Una media insuficiente, ya que el máximo aforo de las instalaciones es de 150 personas y en la actualidad acogen a casi 300 inmigrantes. Viven hacinados, compartiendo un aseo en cada sala, tirados en el suelo en colchonetas hinchables, entre chinches, y con falta higiene y de comida.

Las terribles condiciones en que viven estas personas también las comparten los policías nacionales que trabajan con ellos y que denuncia que Cruz Roja se niega a limpiar las instalaciones, pese a que cobra por ello, por miedo a la transmisión de enfermedades y la plaga de chinches existente.

Los jueces exigen medidas a Interior

Además, desde el SUP denuncian que no se respeta el reglamento y en las salas se mezclan los inmigrantes «inadmitidos» en espera de expulsión con los que han solicitado asilo. Una situación de desbordamiento y descontrol que facilita los ya constantes intentos de fuga.

La situación es tal que el pasado mes de diciembre los tres titulares de los juzgados que se ocupan del control de esas salas de inmigrantes del aeropuerto de Madrid-Barajas enviaron un escrito de queja al Ministerio del Interior para que solventara la situación extrema de «hacinamiento sin las más mínimas condiciones de salubridad, higiene e intimidad, que permitan proteger sus derechos básicos en las circunstancias en las que se encuentran, tratándose en algunos casos de familias y menores edad».

La Jefatura Superior de Policía de Madrid respondió con un informe a los jueces. En él relataban que las salas tienen una capacidad para 156 personas y que en ellas se encuentran 244, entre ellas 19 menores de edad. Los sindicatos policiales elevan la cifra hasta los 300 inmigrantes, ya que la avalancha migrante en Barajas sigue creciendo en lo que llevamos de este enero de 2024.

Abundantes peticiones de asilo

En su informe a los jueces, la Policía Nacional precisaba que, de agosto a diciembre de 2023, el incremento de solicitudes de asilo en frontera se había disparado: pasaron de 767 demandantes desde agosto a noviembre de 2022 a 1.357 en el mismo periodo de 2023.

El informe de la Jefatura de Policía concluyó que «se están llevando a cabo gestiones con los responsables de cada una de las áreas implicadas», desde el gestor aeroportuario a la Oficina de Asilo y Refugio del Ministerio del Interior, para «solventar a la mayor brevedad posible la situación generada».

Desde el SUP señalan directamente a AENA y al Ministerio del Interior como los únicos responsables de la situación. Subrayan que, después de años advirtiendo del problema, no han sido capaces de atajar el problema de la normativa laxa con los vuelos con escala en Madrid, que convierten el aeropuerto de Barajas en un coladero. Tampoco –dicen– han habilitado instalaciones dignas para los inmigrantes, lo que, a su vez, impide que los policías puedan realizar su trabajo en condiciones mínimas de higiene y atajar los crecientes intentos de fuga.