España
CATALUÑA

Puigdemont revela que «gente del PSOE» le ha prometido una reforma del Código Penal y el indulto

El ex presidente de la Generalitat Catalana fugado de la Justicia española, Carles Puigdemont, ha revelado en una carta que miembros del PSOE se han reunido con él a lo largo de los últimos años para generarle «expectativas de un buen trato, vía reforma del Código Penal y un indulto siempre y cuando accediera a comparecer ante el Supremo».

Así lo ha manifestado el golpista Puigdemont en una carta que ha difundido en sus redes sociales a propósito de que se cumplen cinco años de su huida de España. «Seguro que Pedro Sánchez sabe de qué hablo», ha lanzado, días después de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, haya roto las conversaciones con el PSOE para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) tras conocer sus pretensiones de rebajar las penas del delito de sedición, tal y como le exige ERC.

Sin embargo, Puigdemont ha señalado en esa misiva que no entiende «cuál es el beneficio de la reforma del delito de sedición para la resolución del conflicto político entre España y Cataluña». Además, ha agregado que aún entiende menos que se le incluya a él entre los beneficiados de la reforma, un beneficio que, ha asegurado, no quiere ni piensa pedir «de rodillas».

«Puedo entender los beneficios que tiene para el Estado español que yo aceptara una resolución basada en la reforma del código penal, pero los beneficios para el ‘procés’ independentista no los veo pro ningún lado», ha opinado.

Asimismo, ha criticado al Partido Socialista y a ERC por despachar sobre resolver su situación personal en la mesa de diálogo. «Si no se lo he pedido ni autorizado, ¿por qué razón insisten? ¿Qué buscan?», ha argumentado.

El prófugo ha planteado que algunos serían «felices» al verle declarar ante el Tribunal Supremo y «se desvivirían para que fuera indultado a los tres años de condena» algo que ha reconocido sería «un alivio» para su vida personal, pero que, al mismo tiempo, supondría una «renuncia política» que no está dispuesto a aceptar.

En estos cinco años de su huida de la Justicia, ha lamentado haber sido objeto de «todo tipo de campañas sucias, amenazas muy graves, seguimientos, espionajes y acoso familiar».

Algo que achaca al «espíritu del ‘¡a por ellos!’ que decretó el rey español, con la participación de casi todos los partidos políticos españoles y la inmensa mayoría de los medios de comunicación».

Para concluir, ha mostrado su agradecimiento a los que le ha visitado y «trasladado su afecto y apoyo» estos años, especialmente a los exconsellers de la Generalitat Clara Ponsatí, Toni Comín y Lluís Puig, que también residen fuera de España.

Asimismo, ha explicado que en este tiempo se ha hecho más resiliente ante las adversidades y que tiene muchas razones, ha dicho, para continuar confrontándose con el Estado, al que ha acusado textualmente de no buscar soluciones y de querer liquidar a Cataluña como nación: «Continuamos; y tanto que continuamos», ha zanjado.