España
Al contrario que al resto de pacientes

Prohíben al capellán del Hospital La Fe visitar a Zaplana en Nochebuena

El capellán del Hospital La Fe de Valencia no pudo visitar al ex presidente de la Generalitat valenciana, Eduardo Zaplana -ingresado en este centro- durante el día de Nochebuena

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Los servicios religiosos del hospital recibieron la orden expresa de no acudir a la habitación del ex ministro, como sí se hizo con el resto de enfermos. 

Zaplana permanece ingresado en este hospital desde el pasado 17 de diciembre, por complicaciones en su estado de salud, ya muy deteriorado por la leucemia que padece.

La situación se ha agravado considerablemente como consecuencia de los siete meses que lleva en prisión incondicional y sin fianza, en la cárcel de Picassent, por orden de la titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia a raíz del caso Erial, donde figura como investigado (antes imputado) por su presunta implicación en delitos de cohecho, blanqueo de capitales, malversación y prevaricación.

Es tradición que el servicio religioso del hospital realice una visita a los enfermos durante la Nochebuena para darles aliento espiritual y apoyo, además de ofrecerles, por ejemplo, asistir a la Eucaristía o recibir los sacramentos de confesión o comunión. Se trata de una visita muy valorada para los internos en el hospital, que les reconforta en momentos complicados, y más aún tratándose de unas fechas señaladas.

Se da además la circunstancia de que Zaplana, de 62 años, se encuentra aislado en La Fe tanto por su condición de detenido como por su situación sanitaria, por lo que sus familiares no pueden visitarle. Una situación que está resultando especialmente difícil para el ex dirigente del PP.

«Bomba de relojería»

El ex político está siendo tratado para que el deterioro que sufre, como consecuencia de una leucemia, no sea “irreversible”, según informaron fuentes de la defensa. Cada quince días suele acudir desde la cárcel al hospital para realizarse distintas pruebas médicas y recibir tratamiento por la leucemia que padece desde 2015, cuando se sometió a un trasplante de médula.

Sin embargo, recientemente ha experimentado un deterioro físico que ha “alarmado” tanto a los médicos de Picassent como a los de La Fe, que han emitido sendos informes “bastante coincidentes”, según la fuentes de su defensa, y que ha propiciado su ingreso hospitalario.

Precisamente este lunes, El Periódico de Aquí, reveló el último informe remitido al citado Juzgado por parte del jefe de Hematología de La Fe donde advierte del riesgo “potencialmente mortal” que corre Zaplana con los síntomas que presenta a raíz del empeoramiento de su salud de los últimos meses. En el informe se advierte además a la juez de que Zaplana “es una bomba de relojería con posibilidad de muerte súbita e inesperada“.

La enfermedad de injerto contra el huésped (EICH) que sufre como trasplantado por la leucemia, junto con “las secuelas de problemas previos, pulmonares y cardiovasculares fundamentalmente, que ha presentado; los medicamentos que está obligado a tomar y la grave situación de inmunodeficiencia que presenta convierten a Eduardo Zaplana en una bomba de relojería, pudiendo sobrevenirle la muerte de forma súbita e inesperada“, añade el informe que cita ese medio.

Los abogados han presentado ya, al menos, cuatro recursos -todos ellos rechazados- para pedir su puesta en libertad o el arresto domiciliario alegando un “deterioro acusado” del estado de salud del ex ministro.