España
Vacunas Covid

El plan de vacunas del Gobierno deja fuera a cerca de 9.000 policías y guardias civiles por su edad

Los agentes de ambos cuerpos siguen esperando su turno de vacuna mientras que en Cataluña ya han vacunado al 40% de los Mossos y en Euskadi vacunan a 400 ertzainas al día.

  • Alfonso Egea
  • Jefe de Investigación en OKDIARIO. Anteriormente fui responsable de la sección de Actualidad y Sucesos en Espejo Público, en Atresmedia. He publicado cuatro libros y actualmente colaboro en programas de televisión en Mediaset y en Telemadrid. Agradecido por tener el reconocimiento de la Policía Nacional de Madrid y la medalla al mérito de la Guardia Civil.

En la Policía Nacional hay varios grupos profesionales cuya edad media supera la recomendada para recibir la vacuna escogida por Sanidad para inmunizar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Esos rangos reúnen a unos 2.000 agentes de diferentes escalas. En la Guardia Civil hay casi 7.000 agentes de distintos rangos por encima de ese límite. Las asociaciones profesionales consideran que el medicamento escogido para ellos discrimina a un número importante de agentes y denuncian que los policías reciban vacunas con un 70% de efectividad.

Mediados de febrero, casi un año de pandemia después y camino de los dos meses de vacunación en España, y todavía no hay policías ni guardias civiles vacunados en nuestro país. El dato no sería noticioso per se ya que ahora mismo apenas se ha vacunado a un 2% de la población española, sin embargo, sí que es noticia y lo es por varias razones, y ninguna buena. Hace unas semanas el Gobierno anunció que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado junto con otros cuerpos de seguridad, como bomberos o miembros de Protección Civil, serán vacunados en breve como personal esencial. Hasta ahí correcto. Pero al entrar al detalle empiezan los problemas. Para empezar, como reveló OKDIARIO, Cataluña y País Vasco le han ganado por la mano al Ministerio del Interior y llevan días vacunando a sus policías autonómicas y cuerpos de seguridad. De hecho, ya está vacunado el 40% de los Mossos d´Esquadra y en el País Vasco se estima que el ritmo será de 400 agentes vacunados al día.

Pero las quejas de las vacunas de los policías y de los guardias civiles no viene tanto por ser los segundones en vacunarse, están acostumbrados a que las autonomías con las competencias de Interior cuiden mejor a sus agentes, sino por lo que supone para ellos el calendario, efectividad y condiciones de la vacuna que van a recibir.

En cuanto a las fechas, cada día que pasa es un día más en la calle de los agentes que tienen contacto directo con miles de ciudadanos. Casi 80.000 policías y casi 70.000 policías nacionales pendientes de vacuna sin fecha en el horizonte, sólo un turno.

Desconfían de la vacuna escogida

El siguiente problema es la vacuna escogida. A día de hoy será la de AstraZeneca y esta vacuna en concreto llega al mercado con un 70% de efectividad contra el Covid reconocida por la propia empresa farmacéutica. Todas las asociaciones profesionales de Policía y Guardia Civil coinciden en la misma crítica: no les parece buena idea usar un fármaco con un margen tan alto de error con un colectivo que está en contacto estrecho permanente con población de riesgo. Pero incluso en eso se muestran algo comprensivos ya que asumen que la urgencia en la fabricación de vacunas provoca que no todas funcionen al 100%.

En lo que todos se muestran absolutamente en desacuerdo es en que la vacuna escogida para ellos discrimine directamente a miles de agentes que por razón de edad no podrán ser vacunados. El Ministerio de Sanidad siguió las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud por la que se recomendaba no administrar la vacuna de AstraZeneca a los mayores de 55 años. Al parecer detrás de esta decisión hubo una serie de criterios médicos que se basaban en el número de personas mayores de 55 años que se habían incluido en los ensayos de la vacuna. En España Sanidad adoptó ese criterio y descartó directamente a los mayores de 55 años, y ahora, pese a que la OMS ha variado ese criterio y ya permite aumentar el rango de edad, Sanidad insiste: no se administrarán vacunas de AstraZeneca a  policías ni guardias civiles mayores de 55 años. Las asociaciones recuerdan que hay miles de agentes por encima de esa edad y que con 55 años todavía queda una década de servicio hasta la jubilación, y los datos obtenidos por OKDIARIO confirman este temor.

En el Cuerpo Nacional de Policía hay varias categorías policiales en las que la media de edad supera los 55 años: comisarios principales, comisarios jefes, inspectores jefes y facultativos, cuatro categorías profesionales que suman aproximadamente 2.000 agentes. Por cierto, para quien pueda creer que la mayoría de 55 años en la Policía es sinónimo de inactividad ahí va un ejemplo práctico: inspector, jefe de un grupo de Unidad de Intervención Policial del CNP, recién llegado de un destino complicado en lo sanitario, Gran Canaria, custodia del campamento de Barranco Seco. ¿Edad? 60 años. En plenitud de facultades físicas, las UIP exigen ese estado, pero sin derecho a ser vacunado con el plan actual de vacunas para policías.

Pero es que en la Guardia Civil es peor aún y son casi 7.000 los guardias de diferentes rangos que superan los 55 años. Cabos mayores, subtenientes, coroneles, etcétera. Estos datos son los que da la razón al temor de estos colectivos: Cerca de 9.000 agentes de Policía y Guardia Civil se quedan sin vacuna por el momento, al menos hasta que el Gobierno corrija sus planes o elija otra vacuna que no los deje fuera a ningún miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en activo por razón de su edad.