España
Crisis del coronavirus

El plan de desconfinamiento admite que es Illa y no los expertos quien decide sobre el cambio de fase

Coronavirus: última hora del Covid-19 y la desescalada, en directo

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El ‘Plan para la transición hacia una nueva normalidad’, en el que el Ministerio de Sanidad plasma las fases para recuperar la actividad tras el confinamiento por la pandemia de coronavirus, admite que es el ministro Salvador Illa el que toma las decisiones sobre el cambio de fase. En el protocolo, clave para el futuro de los diferentes territorios, no se menciona a los supuestos expertos a quienes el Gobierno atribuye esa decisión.

El oscurantismo en el inicio del plan de desescalada ha sido criticado incluso desde las regiones socialistas. Tanto por la falta de informes como por el hecho de que se desconozca la identidad de esos presuntos expertos que valoran los informes remitidos a las comunidades y proponen su salto de fase.

Tanto Illa como el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, o el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, han rechazado revelar quiénes son esos técnicos. Simón se excusó en que, de hacerlo, serían objeto de presiones. Pero esa opacidad incumple la Ley de Salud Pública y la Ley de Transparencia. 

«Estamos siendo asesorados por expertos de una extraordinaria calidad desde el punto de vista científico y de compromiso de servicio público y lo único que puedo hacer es reivindicar su profesionalidad y reconocer su compromiso», se limitó a responder Sánchez el sábado en alusión a los técnicos de Sanidad. Supuestamente, esos expertos serían los encargados de revisar la documentación enviada por las comunidades autónomas y valorarían si se cumplen los criterios para que determinados territorios pasen o no de fase. Una decisión trascendental.

La opacidad del Gobierno ha hecho dudar de la existencia misma de ese comité. Este lunes, Fernando Simón reveló que la decisión definitiva es política y corresponde al ministro de Sanidad.

«De esos informes nos responsabilizamos tanto yo como la directora de la Dirección General de Salud Pública, y posteriormente la decisión final se toma a nivel de ministro», aclaró, en su habitual rueda de prensa diaria.

Sin rastro de los expertos

Lo cierto es que el plan para el desconfinamiento que Sanidad hizo público hace unos días tampoco menciona el papel de esos expertos en la toma de decisiones.

La única referencia se limita a la elaboración misma del plan, cuando se afirma que gracias, entre otros, al «conocimiento aportado por los expertos en el ámbito sanitario y epidemiológico, estamos en condiciones de avanzar en España en la desescalada gradual de las medidas extraordinarias de restricción de la movilidad y el contacto social adoptadas hasta la fecha y facilitar una recuperación, lo más rápida posible, de la actividad social y económica».

En este contexto, se añade, el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) elevó el 25 de abril un informe al Gobierno, que también recabó la opinión y propuestas de expertos en el ámbito sanitario, científico, social y empresarial.

Su papel, por tanto, aparece limitado a la evaluación de las propuestas iniciales remitidas por las comunidades autónomas para el diseño de las fases del proceso de desescalada, que luego se plasmaron en el plan.

Illa decide

Sin embargo, en el apartado ‘Metodología de la toma de decisiones’ se apunta directamente a Illa: «El ministro de Sanidad decidirá en qué fase se encuentra cualquier territorio del país, con base en los parámetros que conforman el panel de indicadores, que serán evaluados de manera cualitativa y conjunta para permitir la transición de una fase a otra».

«El proceso de toma de decisiones se articulará mediante una orden del ministro de Sanidad», se añade.

A Illa se le atribuye además un poder total para «modificar, ampliar o restringir» las actividades permitidas en casda fase y su alcance «en función de la evolución de la pandemia».

«Los criterios técnicos del ámbito sanitario han sido expresamente consensuados por los equipos técnicos del Ministerio de Sanidad y de las Consejerías de Sanidad de las comunidades autónomas. El resto de criterios serán evaluados mediante el procedimiento que se determine, oído, en su caso, el ministerio competente por razón de la materia», se menciona.

«El ministro de Sanidad decidirá, cada dos semanas, en qué fase de desescalada está cada territorio», se indica.

Las comunidades autónomas, oídas las entidades locales afectadas, podrán proponer además al ministro de Sanidad que un territorio concreto de su comunidad sea declarado en una fase diferente del proceso de desescalada. De nuevo, «el ministro de Sanidad decidirá, en su caso, la transición de fase del territorio concreto propuesto por la comunidad autónoma».

Indicadores

El plan establece una serie de indicadores «objetivos relevantes medibles y confiables» sobre los que adoptar la decisión del cambio de fase. Sanidad, en cambio, no ha revelado los informes de valoración de esos criterios, la clave para decidir el futuro de las diferentes regiones. Ni tampoco se han fijado umbrales para valorar cada indicador. El plan admite que esos indicadores «se evaluarán de manera conjunta y cualitativa». 

Aunque se habla también de cooperación con las comunidades autónomas, se insiste en que la última palabra corresponde al Gobierno y a su Ministerio de Sanidad. El Ministerio tendrá un «papel decisivo» y aunque la desescalada se hará, aseguran, «escuchando a las autoridades autonómicas y locales», se afirma, «siempre se avanzará de una manera coherente que no ponga en riesgo el objetivo final: ganar la batalla contra la Covid-19 en toda España».