España
Memoria Histórica

Iglesias se ofrece para traer a España los restos del jefe de la banda terrorista FRAP en la que militó su padre

Álvarez del Vayo, ex ministro de la II República, fue expulsado del PSOE por la radicalización de sus posturas

El comité pro-FRAP del padre de Iglesias reivindicó el "ajusticiamiento de los asesinos policías" en el 73

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, se ha ofrecido a traer a España desde Ginebra los restos de Julio Álvarez del Vayo (1891-1975), jefe de la banda terrorista Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP) en cuyo comité promotor militó el padre del líder de Podemos, Javier Iglesias Peláez.

A través de un mensaje en su cuenta oficial de Twitter, el ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 aplaudió la decisión de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática, dependiente de Carmen Calvo, de asumir el gasto funerario de la tumba de Álvarez del Vayo. Pero no se quedó ahí, Iglesias deslizó que si la familia del ex ministro de Estado en la II República -luego expulsado del PSOE- da el consentimiento, él impulsaría desde el Gobierno el traslado de los restos que ahora se encuentran en el cementerio de Saint-Georges de la ciudad suiza.

«Julio Álvarez del Vayo, socialista, ministro de exteriores de la República, resistente antifascista, merece que nos ocupemos de su tumba en Francia. Y si sus familiares quieren, merece descansar en su patria con todos los honores de héroe de la democracia», escribió Iglesias este martes en su perfil de dicha red social.

Sin embargo, Álvarez del Vayo fue entonces expulsado del PSOE por la radicalización de sus posturas, tanto que se convertiría en uno de los impulsores del Comité pro-FRAP y luego, desde 1974, en líder del grupo terrorista hasta su muerte. El padre de Pablo Iglesias fue seguidor de Álvarez de Vayo como militante del comité pro-FRAP, al que pertenecía como integrante de la Federación Universitaria Democrática Española (FUDE).

Del FELN al FRAP

En el exilio y fuera del PSOE, Julio Álvarez del Vayo fundó el Frente Español de Liberación Nacional (FELN), que junto con el PCE (m-l) fue el germen de lo que llamaron ‘Comité pro-FRAP’, cuyo origen fue una reunión determinante para su puesta en marcha. Este encuentro tuvo lugar en enero de 1971 en París, en un piso propiedad del dramaturgo estadounidense Arthur Miller, amigo personal de Álvarez del Vayo. El ex ministro de la II República estuvo presente con un papel destacado y allí se definieron los objetivos del Frente. Formaron el comité coordinador el propio Álvarez del Vayo, por el FELN; Alberto Fernández, por Vanguardia Socialista, y Raúl Marco (Julio Fernández), Elena Ódena (Benita Ganuza) y Eladio Zújar (Lorenzo Peña) por el PCE (m-l).

Aunque Benita Ganuza, Elena Ódena, y Juan Miguel Fernández, Raúl Marco, actuaron como cabecillas del grupo y jefes operativos, Álvarez del Vayo estuvo a la cabeza del Comité pro-FRAP desde 1971, y a partir de 1973, con la constitución asamblearia del FRAP, ejerció como presidente designado hasta su muerte en mayo de 1975.

Durante esos años, se produjeron las dos muertes de policías en la violenta manifestación del Primero de Mayo de 1973, para la que el padre de Pablo Iglesias repartió propaganda ilegal y por la fue detenido y encarcelado.  A partir de 1974, cuando Iglesias Peláez dice que abandonó su militancia en el FRAP por no compartir la línea de «lucha armada», y hasta la muerte de Álvarez del Vayo, el grupo terrorista cometió diversos atentados, en su mayoría de baja intensidad. Cabe precisar que días antes de fallecer el ex ministro socialista, el FRAP hizo explosionar un artefacto en el interior de un automóvil junto al estadio Santiago Bernabéu. Aquel año, el grupo terrorista terminó matando a cinco policías en otras acciones.

Había ya una colecta

Ahora, a su siniestro presidente, el primer Gobierno socialcomunista en 80 años ha accedido a pagarle la tumba e incluso repatriar su restos a España para rendirle homenaje y «dignificar su figura». Si bien el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero, iniciador del revisionismo histórico, rehabilitó a Julio Álvarez del Vayo en 2009 devolviéndole el carné del partido a título póstumo, el Ejecutivo de Pedro Sánchez en la anterior legislatura no materializó la petición de la Asociación de ex guerrilleros españoles en Francia para evitar que los restos del presidente del FRAP pasaran a un osario. Por lo que dicha asociación había abierto ya incluso una colecta. Sin embargo, ahora, con el Frente Popular de nuevo gobernando, Pablo Iglesias quiere culminar la obra de Zapatero en lo referente a Álvarez del Vayo. Y a costa de todos los contribuyentes.

Tal y como cuenta Federico Jiménez Losantos en su nuevo libro, titulado La vuelta del comunismo (Editorial Espasa), la fórmula creada para llamar ‘Comité pro-FRAP’, donde militó el padre de Iglesias, a lo que era lisa y llanamente el FRAP, se trataba de «mera imagen, por si picaba algún burgués antifranquista con dinero, harto necesario en plena expansión y en la clandestinidad». «En realidad, el FRAP (…) se quita lo de Comité Pro en 1974 porque no engañaba a nadie y porque en el Congreso de 1973 se dice que el PCE (m-l) tiene fuerza para impulsar la llamada lucha armada solo», señala el autor.