España
Instituto 25 M

Monedero impone la precariedad en la fundación de Podemos: 10 fijos frente a 28 temporales

El Instituto 25M, la fundación ligada directamente a Podemos, tiene entre su personal contratado más trabajadores voluntarios y temporales que empleados con contrato indefinido. Así se desprende de las cuentas anuales de 2020 que han aprobado recientemente. Por un lado, la fundación que dirige Juan Carlos Monedero tiene 10 miembros como personal asalariado. Mientras tanto, tiene 28 trabajadores que aparecen bajo el epígrafe «personal con contrato de servicios». Por último aparecen 10 integrantes de la entidad como «personal voluntario».

Las cuentas anuales del Instituto 25M reflejan la previsión de personal contratado y la cifra real a cierre de 2020. Llama la atención que el equipo de Monedero tenía aspiraciones de conseguir a 225 personas voluntarias. Sin embargo, no han conseguido movilizar ni una vigésima parte. De 225 personas que se marcaban como reto al final han logrado contar con 10 voluntarios que han desarrollado 100 horas de trabajo frente a las 2.150 previstas.

Por otro lado, el personal asalariado tenía que hacer 13.385 horas pero finalmente parece que han tenido que hacer horas extra porque esa cifra se ha disparado hasta las 17.211 horas. En cuento al personal con contrato de servicios, se contaba con 1.525 horas de desempeño que finalmente se han quedado en tan solo 993 horas.

Resumen de personal del Instituto 25 M.

En ese mismo apartado el Instituto 25 M refleja que muchas actividades previstas se han quedado lejos de llegar a los objetivos marcados a priori. Buena parte de los proyectos de cara al público general que han impulsado los morados no han superado las expectativas. Hay iniciativas que pretendían alcanzar a 10.000 beneficiarios o usuarios y se han tenido que conformar con impactar en 1.000 personas. Otra actividad quería llegar a 2.000 individuos y se ha limitado a 300.

La precariedad laboral de la fundación de Podemos, donde el trabajo estable brilla por su ausencia también se refleja en la propia estructura del partido. El partido ahora liderado por Ione Belarra ha eliminado el último año el 17% del total de sus empleados fijos y ha aumentado un 16% los contratos temporales. A cierre del ejercicio, el 62% de los trabajadores de Podemos son temporales. La eventualidad crece, ya que en 2019 los contratos con fecha de caducidad eran únicamente el 54% del cómputo global.

Los líderes de Podemos, y especialmente Monedero, se ponen a la cabeza de las manifestaciones ligadas a las reivindicaciones laborales, pero el partido hace con sus trabajadores justo lo contrario de lo que propugna en sus programas electorales y discursos. Cabe recordar que en 2018 registró en el Congreso de los Diputados una propuesta de ley para restringir al máximo la temporalidad, propuso limitar las causas que justifican este tipo de contratos y fijar penalizaciones. Partían de la premisa de que un contrato de trabajo por defecto ha de tener una duración indefinida. Sin embargo, año a año crecen los temporales en la organización morada, que ya son el 62% de la plantilla.

Bajas

El total de contratos de todo tipo en Podemos es de 229. Muy lejos quedan los 443 que tenían en 2018. El número de trabajadores en el propio partido se ha reducido de 176 empleados a 152 en 12 meses. Sin embargo, Podemos ha exprimido su presencia institucional para colocar a su gente en los grupos parlamentarios, que pasan de 45 a 77. Por otra parte, están los trabajadores en los ministerios que no aparecen contabilizados en estos números.

Resumen del personal de Podemos a 31 de diciembre de 2020.

Propuesta de ley

El combate contra la temporalidad laboral siempre ha sido aparentemente una de las prioridades de Podemos. La lucha de Monedero y los suyos contra la contratación ‘basura’ ha estado incluida en todos sus programas electorales y ha formado parte de su discurso más recurrente.

La propuesta de ley que impulsaron contemplaba penalizar en la cotización a la Seguridad Social a las empresas que superen determinados umbrales de temporalidad. Según indicó el propio Pablo Iglesias en la presentación del programa electoral para las elecciones generales del 28-A, existe un “abuso” en este tipo de contrataciones. Un abuso en el que incurre el propio Podemos, ya que más de la mitad de sus empleados tienen contratos de trabajo temporales.

3,3 millones menos en sueldos

Como ha desvelado OKDIARIO, Podemos ha publicado finalmente su  contabilidad oficial de 2020 y ahí se descubre que, tras entrar en el Gobierno, ha gastado 3,3 millones de euros menos en sueldos tras colocar a sus cuadros en el Ejecutivo. En 2019 los morados cerraron sus cuentas en números rojos, pero en 2020 se han salvado las pérdidas gracias a las nóminas que han dejado de pagar. Se trata de varias decenas de personas que ya no cobran del partido y sí de los presupuestos de los ministerios.