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Crisis coronavirus

La última chapuza de Sánchez: los niños podrán ir con sus padres al súper pero no al parque

En ningún caso es un pasaporte para que puedan salir a jugar al parque o a dar vueltas por la vía pública de forma reiterada

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  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

Tres días del anuncio por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que con el nuevo estado de alarma se permitiría salir a la calle a los niños, este martes la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha dado algunos detalles sobre la decisión. El Ejecutivo permitirá la salida de los niños de hasta los 14 años para acompañar a un adulto en sus desplazamientos.

En concreto lo que se les permitirá a las familias es que los menores puedan acompañar a su padre o a su madre bien en sus visitas al supermercado, la farmacia o las entidades bancarias. De esta forma el Ejecutivo acota las posibilidades de contagio de los pequeños tras el anuncio vacío de Sánchez del pasado sábado. No podrán acudir al parque como medida de prevención contra el coronavirus.

Montero ha advertido que «es responsabilidad de los adultos que los menores cumplan las recomendaciones». De incumplir las excepciones por las que pueden salir a la calle a partir del lunes, serán sus tutores legales los destinatarios de las sanciones que impondrán las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

La medida no dista mucho de la posibilidad que ya existía hasta ahora en el caso que, durante la realización de una de las actividades citadas con anterioridad, nadie pudiera hacerse cargo de los menores dentro de la vivienda habitual. La diferencia, ahora, es que no hará falta justificar que nadie puede vigilar a los niños durante esas salidas.

El Gobierno insiste en que se trata de una medida excepcional para que los menores no estén tantos días encerrados en casa. En ningún caso es un pasaporte para que los niños puedan salir a jugar al parque o a dar vueltas por la vía pública de forma reiterada. Aunque no se han impuesto horarios para la salida de los niños, como ya ocurre con los perros, si un agente detecta muchas salidas de los menores sus padres podrán ser sancionados.