España

Las mascarillas serán obligatorias en espacios cerrados y en la calle si no se guardan 2 metros de distancia

El Gobierno hará obligatorio el uso de las mascarillas en espacios cerrados y en la vía pública, en aquellos casos en que no sea posible garantizar la distancia mínima de seguridad de dos metros.

Así se ha acordado en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, celebrado esta tarde con las Comunidades Autónomas. El uso de las mascarillas quedará regulado en una Orden ministerial que se publicará en los próximos días.

Hasta ahora, el uso era obligatorio en el transporte público. Sin embargo, el Gobierno lleva días valorando ampliarlo, como se le había venido reclamando desde distintos gobiernos regionales, especialmente el de la Comunidad de Madrid. El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso adquirió recientemente 14 millones de mascarillas FFP2 para repartirlas entre los ciudadanos.

El uso de las mascarillas ha provocado diversidad de opiniones en el seno del Ejecutivo. Incluso contradicciones acerca de qué tipo es el más adecuado. El portavoz del Centro de Alertas y Emergencias, Fernando Simón, valoró la iniciativa de Madrid como una «buena medida» y explicó que «el uso de las mascarillas FFP2 está indicado en personas sanas» porque «las personas que tienen sintomatología debería utilizar las quirúrgicas».

Días después, el Ministerio de Consumo de Alberto Garzón emitió una nota afirmando que no se recomendaba el uso de este tipo de mascarillas entre la población general. Posteriormente, Simón se corrigió a si mismo asegurando que las mascarillas quirúrgicas «son más llevaderas y más asequibles» y que las de tipo FFP2 «no están recomendadas para la población general».

Este periódico reveló hace días que en los propios protocolos del Ministerio de Sanidad -‘Recomendaciones sobre el uso de mascarillas en la comunidad en el contexto de Covid-19’- ya se contemplaba la posibilidad de que esa protección fuese obligatoria, en caso de existir disponibilidad.

El informe establecía «cinco opciones» que «se podrían convertir en niveles de implementación progresiva de la obligación o recomendación de uso, en función de la disponibilidad que haya, asociada necesariamente a la provisión de mascarillas a sus destinatarios»El quinto nivel es un uso generalizado, para la población «que tiene que salir a la calle», a «farmacias, supermercados, etc».

El documento señala que «el uso de mascarillas en población general puede servir como un medio de control de la fuente de infección al reducir la propagación en la comunidad ya que se reduce la excreción de gotas respiratorias de individuos infectados que aún no han desarrollado síntomas o que permanecen asintomáticos».

Sin embargo, se avisa también que «el uso de mascarillas en la comunidad debe considerarse sólo como una medida complementaria y no como reemplazo de las medidas preventivas establecidas, por ejemplo, distanciamiento físico, etiqueta respiratoria, higiene de manos y evitar tocarse la cara, la nariz, los ojos y la boca».

El Partido Popular presentó hace unos días su plan alternativo de desconfinamiento, en el que se incluye su uso obligatorio en la calle y recomendado para mayores de 65 años en espacios cerrados, cuando se encuentren con personas con las que no convivan.