Marlaska sabía desde el 15 de abril que dos escoltas de Iglesias reventaron el mitin de Vox en Vallecas

Alberto, uno de los 13 detenidos tras los altercados que se produjeron en Vallecas por el mitin de Vox, trabajaba en el turno de noche de los servicios de limpieza del ayuntamiento de Madrid, y Daniel, el otro trabajador de Podemos, es el hermano del boxeador que da seguridad al líder de Podemos, Pablo Iglesias, en el casoplón de Galapagar.

El trabajo de la Brigada Provincial de Información de la Policía permitió identificar a este miembro de la seguridad de Podemos y al hermano del boxeador que ha protagonizado incidentes con la Guardia Civil en el chalet de Galapagar.

Alberto ronda los 45 años y al menos hasta 2017 se ganaba la vida trabajando para el SELUR, el Servicio de Limpieza Urgente del Ayuntamiento de Madrid. Es curioso que este tipo se ganara la vida en una empresa pública dedicada a limpiar los desperfectos y la suciedad producida tras manifestaciones en las que se produjeran desperfectos, pequeños incendios y suciedad en general y que cuatro años después haya sido él el uno de los violentos manifestantes que dejó una plaza de Vallecas reventada y sin adoquines después de participar en la batalla campal del mitin de Vox de Vallecas.

Pero Alberto no es uno más: dejó de ganarse la vida como limpiador municipal para desde aproximadamente 2017 ser fichado por Pablo Iglesias como miembro del servicio de seguridad de Podemos.

Decimos 2017 porque OKDIARIO ha podido confirmar a través de fuentes policiales que, hasta ese año a Alberto y a Daniel, otro de los empleados de Podemos para su seguridad y la de Pablo Iglesias, y también detenido por estos hechos del mitin de Vox en Vallecas, no se les vio nunca proteger a quienes en aquella época formaban la cúpula del partido: Pablo Iglesias, Íñigo Errejón, Carolina Bescansa y otros.

Pero es que lo de Alberto, si no fueran hechos tan graves, resulta hasta cómico. El detenido por los disturbios en Vallecas está dado de alta por Podemos en su plantilla. Pero como no siempre fue así, Alberto ha sido identificado por personas que lo conocieron en su faceta laboral anterior, la de limpiador municipal. ¿Y dónde hacía su trabajo Alberto? Pues ni más ni menos que en el parque de vehículos de Moratalaz.

¿Por qué ese parque en concreto es llamativo? Porque allí hay vehículos de servicios de Emergencia, pero sobre todo de Policía Nacional, ya que es dónde se enclava una de sus mayores dependencias en Madrid. A Alberto lo han identificado policías que lo conocieron con su mono de trabajador de la empresa municipal a los que ahora les tiraba piedras y pegaba pitadas en el mitin de Vox.

Con el informe de la Brigada Provincial de Información de Madrid casi acabado la conclusión es que lo de Vallecas no fue una explosión popular espontánea para echar a la derecha de los barrios populares. Fue una emboscada organizada a la que se sumaron mano de obra remunerada y dada de alta en la Seguridad Social por Podemos.

Porque Alberto no estaba solo. Otro de los 15 detenidos ha sido Daniel, también dado de alta y empleado por Iglesias. Pero en el caso de Daniel que su patrón sea el candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid que, en teoría, se beneficia de los ataques a Vox es anecdótico. Lo importante de Daniel es su familia.

Daniel está emparentado con un experto en artes marciales, Iñaki Jiménez, al que se lo conoce como El Pikarras. Este sujeto también realiza labores de escolta para Podemos, pero en su caso la relación con el patrón Iglesias es mucho mayor, porque donde se le ha visto ejercer sus labores ha sido en la residencia privada del candidato Iglesias y su pareja la ministra Montero.

De hecho, Iñaki Jiménez el Pikarras ha protagonizado incidentes en Galapagar con la Guardia civil que sí protege de forma oficial la residencia de los Iglesias-Montero. Al parecer, el empleado de Podemos no sólo trataba de identificar a peatones que pasaban cerca de la vivienda, sino que incluso trató de organizar la labor de los agentes allí desplegados.

Las detenciones de ambos miembros de la seguridad de Podemos se llevaron a cabo el 15 de abril. El ministro del Interior, Fernando Grande – Marlaska, estuvo al tanto de las identidades de los detenidos y, aun así, se omitió el dato de la vinculación laboral de dos detenidos con un partido que pretendía sacar rédito político de aquellos hechos.

Estas detenciones tras los hechos de Vallecas ponen de manifiesto el tamiz profesional con el que Podemos nutre las filas de sus servicios de seguridad. Los guardaespaldas de Iglesias fueron puestos en libertad con los cargos de agredir a agentes de policía en una emboscada planificada al milímetro según las conclusiones policiales.