Marlaska eludió visitar a la familia del niño asesinado en Lardero tras dar un mitin del PSOE a 5 km

• Agustín de Grado @a_degrado
• Subdirector y responsable del Área Política en OKDIARIO. Antes jefe de área en ABC, subdirector en La Razón y director de Informativos en Telemadrid.
• • 01/11/2021 12:42
  • Actualizado: 05/11/2021 02:12

Estaba a sólo 12 minutos en coche. Sin embargo, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, eludió este domingo acercarse a consolar la familia del niño asesinado en Lardero (La Rioja) por un depredador sexual que disfrutaba de libertad condicional desde hace 19 meses por buen comportamiento, que había accedido al tercer grado en contra de la opinión de la prisión y que durante su estancia en ella se le había facilitado viagra para mantener sexo con desconocidas.

El otrora juez ahora convertido en ministro del Interior acudió a Logroño para clausurar el 15 Congreso de los socialistas en La Rioja pese a no ser militante del PSOE. El pueblo donde fue asesinado el pequeño Álex, de nueve años, está a cinco kilómetros y medio del Palacio de Congresos Riojaforum donde el PSOE celebró su cónclave.

En lugar de encontrar un hueco en la agenda dominical para visitar a la familia del pequeño, Marlaska compareció ante los periodistas para criticar que «a la derecha parece que le gusta instrumentalizar las tragedias humanas con carácter político», en alusión a la petición de responsabilidad que el PP había realizado por la concesión de la prisión condicional a Francisco Javier Almeida, vecino de Lardero y con antecedentes por agresión sexual en 1993, por la que se le sentenció a 7 años de prisión, y por asesinato y agresión sexual, en agosto de 1998, sentenciado a 20 años y 10 años, respectivamente.

El ministro del Interior expresó su máxima «solidaridad y apoyo», en nombre de todo el Gobierno, a los padres, hermanos, familia y amigos de Álex, porque esta muerte ha sido «una tragedia que nos toca a toda persona que tenga un mínimo sentido de humanidad». Estaba a sólo 12 minutos en coche oficial para poder trasladárselo directamente, pero prefirió no hacer el pequeño recorrido.

Mientras el ministro clausuraba el congreso del PSOE en Logroño, en el pueblo vecino de Lardero miles de personas se concentraban para exigir al Ministerio del Interior que «se ponga manos a la obra» para que un crimen como el de Álex sea el último. Gonzalo Martín, tío abuelo del pequeño asesinado, recordó que Almeida había salido en libertad condicional hace 19 meses. «Y en 19 meses, creo que la justicia ya podía haber hecho algo con este individuo, con este asesino que hemos tenido suelto, con el que ha pasado lo que ha pasado», proclamó.

La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, concedió en febrero del año 2020 el tercer grado al presunto asesino de Álex en contra del criterio de la cárcel. Poco después llegó la libertad condicional. «Todas las instituciones han trabajado ateniéndose al principio de legalidad», pero, «evidentemente, cuando acontece una tragedia como esta, se evalúa mucho más el desarrollo de los acontecimientos para sacar las conclusiones necesarias», afirmó Marlaska sin asumir ninguna responsabilidad.

La gestión del Ministerio del Interior y de Instituciones Penitenciarias está en entredicho también por el hecho de que cuando Almeida salió de prisión en abril de 2020 tuvo que comunicar a la cárcel de Logroño la dirección donde residiría. Era una de las condiciones para su libertad condicional. Sin embargo, al departamento de Marlaska no se le activó ninguna alarma cuando el detenido por la muerte de Alex, con un dilatado historial de depredador sexual a sus espaldas, comunicó que viviría a 30 metros de un colegio infantil. Ahora los investigadores sospechan que buscó a propósito esta zona con vistas a cometer su ataque.