España

Margallo y Pastor votarán por correo para asistir a la inauguración del Canal de Panamá el 26J

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo y la ministra de Fomento, Ana Pastor, tendrán que votar por correo de cara al 26J para asistir ese mismo día a la inauguración del Canal de Panamá. La máxima representación de nuestro país, en principio, no podrá asistir por motivos electorales. Así, tanto el Rey Felipe VI como el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, no podrán asistir al acto de esta gran obra de ingeniería que lleva el sello de la empresa española Sacyr.

Fuentes consultadas señalan que tanto adelantar como retrasar la fecha de inauguración del acto no hubiera servido para nada al Gobierno español. El adelanto hubiera supuesto asistir en plena campaña y con el Gobierno en funciones y atrasarlo supondría seguir en funciones y con los dirigentes dispuestos a reunirse para pactar. Además, el adelanto hubiera sido imposible ya que Sacyr entrega la obra el 31 de mayo, con muy poco margen de maniobra para que la Autoridad de Canal lo prepare y los súper barcos de contenedores, los Post Panamax, empiecen a utilizar el nuevo paso transoceánico. Asimismo y con el considerable retraso que lleva, necesitan cuanto antes empezar a ‘facturar’ y recuperar una ingente inversión de más de 5.000 millones de dólares. Tal y como apunta ‘diariocritico.com’, en el Caribe se han construido también puertos especiales para este nuevo tráfico marítimo que no pueden estar parados más tiempo y Suez es un duro competidor.

La excusa oficial para elegir el 26 de junio es que era la única fecha disponible en la agenda de Barack Obama y del presidente chino Xin Jinping. Sin embargo, ambos mandatarios tampoco asistirán a la cita, ni tan siquiera el vicepresidente Biden por razones desconocidas hasta el momento.

Para el Gobierno español y sobre todo su presidente también era sin duda la solución más práctica una vez abocados a las elecciones. Por ello, serán Margallo y Pastor los anfitriones españoles. La ausencia de autoridades podría ser un desaire para el Gobierno de Panamá, un país donde hay muchas más empresas españolas con importantísimos contratos, y a ser posible no tenga coste electoral.