Un mando de los Mossos de Gerona se enfrentó a la Policía el 1-O y la acusó de agresión tras votar
El subinspector jefe de Investigación de Plà de l’Estany (Gerona), Miquel Àngel Cherino, no sólo increpó y trató de impedir de forma violenta dentro de un piquete el acceso de la Guardia Civil a un colegio en cumplimiento del mandato judicial el 1-O, sino que votó, exhibió la fotografía del momento en las redes sociales y publicó mensajes asegurando que había sido agredido y atacado «por las tropas del Estado español».
Cherino, de 49 años y que sigue ejerciendo como responsable de la Unidad de Investigación Judicial del Área Básica Policial (ABP o comisaría) de este municipio gerundense, fue uno de los 200 independentistas que insultaron e intentaron cerrar el paso con golpes a los agentes del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Benemérita.
«Nos atacaron tropas del Estado español»
El subinspector ‘indepe’, al parecer ‘de día libre’, no sólo participó en los enfrentamientos a las puertas del colegio de San Julián de Ramis y colgó una foto en las redes con una herida superficial en la sien como ‘prueba’ de haber recibido un golpe, sino que publicó un mensaje cargando contra las Fuerzas de Seguridad del Estado que acudieron al centro ante la pasividad de los Mossos d´Esquadra.
Así, en el mensaje que pueden leer bajo estas líneas, habla de «reivindicaciones pacíficas hasta que han llegado las tropas del Estado español», y que «nos han atacado, a nosotros y a nuestras instituciones»
No queda ahí el escrito de ese mando de los Mossos, que a continuación afirma «he sido agredido por los antidisturbios de la Guardia Civil», a los que acusa de que «ellos han sido los que han creado los disturbios». Finalmente, el subinspector Cherino acusa a las Fuerzas de Seguridad del Estado (un centenar de agentes de Policía y Guardia Civil fueron desplazados ante la posible respuesta violenta de los piquetes separatistas) de haber ido «porque era el colegio donde iba a votar Puigdemont y tenían que marcar paquete».
El expresidente de la Generalitat no votaría finalmente en este colegio ante los incidentes, algo que sí lo hizo en la vecina localidad de Cornellá de Terri, mientras que el subjefe de policía de la comisaría de Plà de l’Estany lo hizo en otro colegio de su localidad, inmortalizando el momento de su voto pese a haberlo declarado ilegal el Tribunal Constitucional.