España
Ley de vivienda

La ley de Chávez que inspira a Sánchez: «La casa desocupada implica tributación especial para el dueño»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El ataque a la propiedad privada perpetrado por Pedro Sánchez con la futura ley de vivienda encuentra una inspiración más que evidente en la misma Venezuela.

La ley para la regularización y control de los arrendamientos de vivienda, aprobada por Hugo Chávez en 2011, plasma el mismo espíritu intervencionista que la próxima norma del Gobierno, con propuestas prácticamente idénticas. Como ejemplo, el siguiente párrafo: «La desocupación de viviendas es contraria al interés social e implica una contribución tributaria especial para las propietarias y los propietarios, que será establecida en esta ley y determinada por el organismo encargado de velar por su cumplimiento, como medida para promover el arrendamiento de viviendas desocupadas que no se ofrezcan en venta, atendiendo a las necesidades sociales en la materia». La ley del Gobierno socialcomunista castigará con un recargo del 150% en el IBI a los propietarios de viviendas vacías, un inédito ataque al derecho a la propiedad.

La inseguridad jurídica que provoca la norma ha encendido las alertas. Las consecuencias del afán intervencionista son visibles en Venezuela, donde, en 2018, Nicolás Maduro lanzó el plan Ubica tu casa, que culminó con la ocupación de los inmuebles vacíos de miles de exiliados. El programa consistía en señalizar las viviendas vacías -mediante un censo-, que después eran ocupadas por colectivos afines y funcionarios policiales. El resultado fue la invasión de las propiedades de venezolanos que no se encontraban en el país y cuyas viviendas fueron adjudicadas a otras personas.

Aún no han trascendido los términos exactos en que se aplicará la nueva medida para la vivienda vacía, empezando por qué se considera como tal. El Gobierno deberá desarrollar la ley para incluir esa definición y los requisitos para imponer el castigo. Aunque, ya en marzo, en plena negociación de la ley, se fue definiendo el camino: los socialistas propusieron entonces a Podemos que se considerase como vivienda vacía aquella que pertenezca a un propietario que tenga al menos otras cuatro propiedades y que lleve desocupada durante más de dos años, a excepción de las causas que se consideren justificadas. La decisión final sobre ese recargo corresponderá a los ayuntamientos.

«Intervencionismo suicida»

El líder del PP, Pablo Casado, ha anunciado este miércoles que su formación presentará un recurso ante el Tribunal Constitucional y no la aplicará en las comunidades autónomas y ayuntamientos que gobiernan. El dirigente popular ha criticado el «intervencionismo suicida» de Sánchez, «rehén de sus socios radicales».

La próxima ley del Gobierno supondrá además un control sin precedentes sobre los precios de los alquileres. Los grandes propietarios -más de diez viviendas- estarán obligados a ajustar las rentas en base a índices de referencia para todos los contratos en zonas de mercado que el Gobierno clasificará de «tensionado».

Asimismo, establece que los pequeños propietarios tendrán una fórmula de «congelación de precios e incentivos fiscales», de cara a poder también reducir el precio del arrendamiento.

La futura normativa apuesta asimismo por el parque público de alquiler, obligando a una reserva del 30% de todas las promociones para vivienda protegida. La mitad de esta proporción, el 15%, se dedicará a alquiler social.