España

El juez ordena detener a los asaltantes de la embajada de Corea del Norte en Madrid

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha dictado una orden de busca y captura internacional para lograr la detención de Hong Chang.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, ha emitido dos órdenes de detención internacional contra el cabecilla y otro miembro de la organización criminal de diez personas que asaltó la embajada de Corea del Norte en Madrid el pasado 22 de febrero, según han informado a Europa Press en fuentes jurídicas. En concreto, el juez ha librado orden de detención contra Adrián Hong Chang, ciudadano mexicano residente en EEUU, y también sobre el ciudadano estadounidense Sam Ryu, el cabecilla y otro de los tres identificados como presuntos autores del asalto.

Precisamente este martes, De La Mata ha levantado el secreto de actuaciones sobre el incidente, que atribuye a una organización criminal formada por diez personas, todas ellas huidas y fuera de España, pues se marcharon el mismo día del asalto a través de Portugal en cuatro grupos distintos y de allí, volaron a EEUU. El líder contactó después con el FBI en Nueva York para informar sobre estos hechos. Según dijo, acometió el asalto por iniciativa propia, teniendo noticia de que algún miembro de la embajada podría querer desertar y una vez dentro, registró el edificio en busca de «armas y otras cosas».

El magistrado apunta a la comisión de delitos de allanamiento de morada, detenciones ilegales, lesiones, falsificación documental, amenazas y robo de los que serían «indiciariamente» autores tanto Hong Chang y Sam Ryu como un tercer identificado, el ciudadano de Corea del Sur Woo Ran Lee. Según expone el juez, Hong Chang se presentó en la Embajada en la tarde del 22 de febrero pidiendo entrevistarse con el encargado Negocios, con el que ya había mantenido una reunión previa haciéndose pasar por empresario. Aprovechando un descuido de un empleado, dejó entrar en el edificio a otros seis asaltantes.

«Inmediatamente penetraron en el recinto de la Embajada, portando machetes, cuchillos, barras de hierro y armas cortas simuladas y comenzaron a golpear violentamente a sus ocupantes hasta que consiguieron reducirlos y colocarles grilletes y bridas para inmovilizarles», explica el auto. Habían comprado todo ese material en una tienda especializada y en una ferretería los días previos al asalto, que fue preparado a caballo entre un hotel de Madrid y una vivienda próxima a la embajada que previamente habían alquilado.

Hong Chang y el resto del grupo huyó a través de Portugal el mismo día del asalto. En Nueva York, el cabecilla contactó con el FBI y pagó el importe de las habitaciones de un hotel para Sam Ryu y Woo Ran Lee y otras dos personas nacionales de Corea del Sur: Siyoung Park y Chung Su Lim. En la embajada dejaron a cuatro personas heridas, retuvieron a dos más y una séptima se hirió de gravedad al huir por una ventana. Fue ella quien dio la voz de alarma. En total, se llevaron del edificio un par de pendrives, dos ordenadores, dos discos duros (uno con imágenes de las cámaras de seguridad) y un teléfono móvil de acuerdo al resumen de los hechos que realiza el juez.