España

Juan Carlos I dice que cuatro décadas de cobro de comisiones y cuentas offshore son hechos «pasados» de su «vida privada»

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Juan Carlos I abandonará España tras la polémica provocada por las informaciones exclusivas reveladas por OKDIARIO sobre sus finanzas en Suiza. Unos hechos a los que quien ha sido Rey de España durante casi 40 años se refiere como «acontecimientos pasados» de su «vida privada». Las revelaciones apuntan a que los negocios opacos se extendieron durante décadas.

En un comunicado posterior, emitido justo después de conocerse la carta que ha remitido el Emérito a Felipe VI, se comunica que el Rey Juan Carlos permanece a disposición de la Fiscalía, que investiga si cobró alguna comisión por la adjudicación del AVE a La Meca a empresas españolas en 2011, «para cualquier trámite o actuación que considere oportuna». Así lo ha expresado su abogado, Javier Sánchez-Junco.

Un entramado

La decisión se produce tras dos años de investigaciones de OKDIARIO para revelar uno de los mayores escándalos que ha vivido España. El testimonio de la ex pareja de Juan Carlos I, Corinna zu Sayn-Wittgenstein, dejaba al descubierto todo un entramado de sociedades y testaferros que ocultaban una auténtica fortuna, que está siendo ya investigada por la Justicia española y suiza.

Agosto de 2018 fue un punto de inflexión para Juan Carlos I. Entonces, el fiscal de Ginebra Yves Bertossa abrió una investigación sobre los hechos, unas semanas después de que OKDIARIO publicara la grabación que el comisario José Villarejo realizó de un encuentro con Corinna y un conocido empresario español, en la vivienda de la ex novia del monarca en Londres.

En la cinta, Corinna revelaba: «Juan Carlos tiene cuentas en Suiza a nombre de su primo [Álvaro de Orleans] y de su abogado Dante Canonica». Corinna también desvelaba las amenazas que recibió del entonces director general del CNI, el general Félix Sanz Roldán, para que rompiera su relación con el Rey Emérito tras el escándalo de la cacería de Botsuana.

Las confesiones fueron determinantes. Y aquella grabación provocó que la Fiscalía de Ginebra abriera una investigación sobre las cuentas suizas de Juan Carlos I.

En estos dos años, las exclusivas en torno a la figura del Emérito se han sucedido. Este periódico publicó también, en octubre de 2018, los correos remitidos a Corinna por la periodista española Ana Romero, que ponían en evidencia que el CNI filtró una noticia falsa para implicar a la ex novia de Juan Carlos I en el cobro de 30 millones de euros de fondos reservados del CNI.

En abril de 2019, OKDIARIO desveló que los servicios secretos españoles y la Dirección de Comunicación de la Casa del Rey filtraron a varios medios que Corinna había actuado como comisionista para que un consorcio de empresas españolas obtuviera el contrato millonario del AVE a La Meca.

El objetivo de esta operación era ocultar el papel que había jugado como intermediaria la iraní Shahpari Zanganeh, que en aquel momento estaba casada con el traficante de armas Adnan Khashoggi (fallecido en junio de 2017). En la grabación publicada por OKDIARIO en julio de 2018, Corinna había desvelado que Juan Carlos cobró parte de la comisión de 100 millones de euros abonada por el consorcio español para obtener la adjudicación del tren de alta velocidad a La Meca.

Este diario también dio a conocer en abril de 2019 el acta, firmada ante notario en Londres, en la que Corinna reconoce que conserva numerosos documentos sobre los negocios de Juan Carlos I. Documentos que prueban “asuntos personales y privados, así como correspondencia oficial, informes políticos confidenciales y transacciones financieras y comerciales en las que se había involucrado al Rey Emérito y otros miembros de la Casa Real”.

En las últimas semanas, OKDIARIO ha venido publicando nuevas revelaciones, aún más concluyentes si cabe, como la donación de Juan Carlos I de 65 millones de euros a Corinna y su hijo Alexander. El dinero lo había recibido del Rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdulaziz. Corinna recibió esta donación a través de la sociedad offshore panameña Lucum Foundation, creada por dos de los testaferros del monarca: Arturo Fasana aparece como presidente de la mercantil y Dante Canonica como secretario.

Debido a la condición de aforado de Juan Carlos I, Anticorrupción ha remitido un informe al Tribunal Supremo en el que aprecia indicios de un presunto delito fiscal y de blanqueo de capitales.

La carta del Emérito

El Rey Juan Carlos ha comunicado este lunes a Felipe VI su decisión de trasladar su residencia fuera de España.

Según relata Zarzuela en un comunicado, el Rey Emérito recuerda que hace un año decidió expresar su voluntad de dejar de desarrollar actividades institucionales y que ahora, «ante la repercusión pública que está generando ciertos acontecimientos pasados» de su vida privada, ha decidido trasladarse fuera de España.

«Es una decisión que tomo con profundo sentimiento, pero con gran serenidad», explica Juan Carlos I, justificando su decisión «para contribuir a facilitar el ejercicio» de las funciones de su hijo como Jefe de Estado.

En su carta, el padre del Rey alude sin mencionarlo al caso de las supuestas donaciones de Arabia Saudí no declaradas a Hacienda, una investigación que arrancó en Suiza y que está estudiando la Fiscalía del Supremo.

Ésta es la carta que Juan Carlos I ha enviado a su hijo Felipe:

«Con el mismo afán de servicio a España que inspiró mi reinado y ante la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de mi vida privada, deseo manifestarte mi más absoluta disponibilidad para contribuir a facilitar el ejercicio de tus funciones, desde la tranquilidad y el sosiego que requiere tu alta responsabilidad. Mi legado, y mi propia dignidad como persona, así me lo exigen.

Hace un año te expresé mi voluntad y deseo de dejar de desarrollar actividades institucionales. Ahora, guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a los españoles, a sus instituciones y a ti como Rey, te comunico mi meditada decisión de trasladarme, en estos momentos, fuera de España.

Una decisión que tomo con profundo sentimiento, pero con gran serenidad. He sido Rey de España durante casi cuarenta años y, durante todos ellos, siempre he querido lo mejor para España y para la Corona.

Con mi lealtad de siempre. Con el cariño y afecto de siempre, tu padre.»

Ante esta carta, el Rey Felipe ha transmitido a su padre «su sentido respeto y agradecimiento ante su decisión».

«El Rey desea remarcar la importancia histórica que representa el reinado de su padre, como legado y obra política e institucional de servicio a España y a la democracia; y al mismo tiempo quiere reafirmar los principios y valores sobre los que ésta se asienta, en el marco de nuestra Constitución y del resto del ordenamiento jurídico», subraya el comunicado de Zarzuela.