España
Crisis del coronavirus

La inmunidad frente al coronavirus no mejora: sólo el 5,2% de la población tiene anticuerpos

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El Ministerio de Sanidad ha dado a conocer este jueves nuevos resultados del estudio de seroprevalencia que lleva a cabo junto al Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), el Instituto Nacional de Estadística (INE) y con la colaboración de las comunidades autónomas. Los resultados apenas varían con respecto a la primera oleada: apenas un 5,2% de la población española tiene anticuerpos. Un tercio de los infectados son asintomáticos.

Los primeros resultados, presentados el 13 de mayo, fijaron ese porcentaje en el 5%. Esta cifra está por tanto muy lejos de lo que se conoce como inmunidad de grupo, esto es, un 60-70%.

Esta segunda oleada se realizó entre el 18 de mayo y el 1 de junio y en ella han participado 63.564 personas.

La tasa de inmunidad es ligeramente inferior en hombres (5,01%) que en mujeres (5,40%). En relación con la edad, la presencia del anticuerpos es menor en bebés, niños y jóvenes y existen moderadas diferencias entre el resto de grupos poblacionales de más edad.

Aunque la media nacional es de un 5,21%, el estudio arroja una marcada variabilidad geográfica, también muy similar a la observada en la primera ronda, con prevalencias iguales o próximas al 10% tanto en Madrid como en las provincias situadas en su entorno.

En relación al tamaño de los municipios, existe un leve incremento de esta tasa de inmunidad respecto a la primera oleada en las grandes ciudades (más de 100.000 habitantes) que han pasado de un 6,4% a un 6,8%.

El 80,5% de los participantes en el estudio que declaran haber dado positivo por coronavirus en un diagnóstico por PCR hace más de dos semanas presentan anticuerpos IgG. En los casos sospechosos, la prevalencia de este anticuerpo aumenta con el número de síntomas y es particularmente alta en las personas que han sufrido pérdida de olfato (40%). En el caso de los participantes asintomáticos, a un 2,8% se les detectó anticuerpos IgG.

Existe un 0,8% de participantes que siendo negativos en anticuerpos en la primera ronda han seroconvertido en esta segunda, es decir, se les ha detectado la presencia de IgG de la que antes carecían. Destacan los casos de Ávila, Valladolid y Palencia, con valores cercanos al 2%, y los de Madrid, Soria y Segovia con un 1,5%.

Finalmente, el mapa de posibles casos con síntomas en las últimas dos semanas muestra, en general, prevalencias inferiores a las de la primera ronda. Sólo las provincias de Santa Cruz de Tenerife, Granada, Madrid, Toledo y Las Palmas están en torno al 1%. Los posibles casos con síntomas se refieren a personas con tres o más síntomas o con pérdida súbita de olfato.

El objetivo del trabajo es estimar la prevalencia de infección del coronavirus mediante la determinación de anticuerpos frente al virus por comunidades autónomas, provincias, edad y sexo. El estudio se desarrollará aún durante varias semanas más, aunque periódicamente se irán conociendo sus resultados.

A los elegidos en un muestreo aleatorio del Instituto Nacional de Estadística (INE) se les somete a un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre por inmunocromatografía. Para el trabajo se han seleccionado más de 36.000 hogares españoles, con el propósito de que la muestra tenga participantes de todos los grupos de edad y localizaciones geográficas. Se calcula que participarán 60.000 personas.

Esta prueba requiere de un pinchazo en el dedo y su sensibilidad se estima que es superior al 80%. Sin embargo, Sanidad, como publicó este periódico, tiene reservas. Admite que «esa información relativa a su precisión diagnóstica se ha obtenido en grupos muy concretos de pacientes y se desconoce si puede extrapolarse al conjunto de la población», como es el interés del estudio.

Las dudas en esta prueba obligan a realizar una extracción de sangre por un pinchazo en el brazo. Pese a que sería deseable para «asegurar la fiabilidad de los resultados y aplicar el máximo rigor metodológico», reconoce Sanidad, no será más que una recomendación y se realizará de «forma adicional» y «en los participantes que den su consentimiento».

Sólo la combinación de estas dos pruebas, con distintos niveles de precisión, permiten obtener una estimación de la presencia de anticuerpos en la población.

«De cada participante se obtendrá la información necesaria para conocer la
existencia de un diagnóstico previo de Covid-19, la presencia o antecedentes de síntomas compatibles con esta enfermedad y los principales factores de riesgo conocidos», señalan desde Sanidad.