España
Inmigración irregular

El Gobierno traslada de Canarias a la Península a 4.448 inmigrantes en 4 meses, el doble que en todo 2020

Así lo revela el Ejecutivo de Pedro Sánchez en una respuesta parlamentaria al PP en el Congreso

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El Gobierno de Pedro Sánchez trasladó desde Canarias a la Península hasta 4.448 inmigrantes ilegales en los primeros 4 meses del año, es decir, el doble de los desplazados en las mismas circunstancias en todo 2020. Así lo ha revelado el Ejecutivo socialcomunista en una respuesta parlamentaria al Grupo Popular en el Congreso de los Diputados.

En concreto, según la contestación consultada por OKDIARIO, «en el marco del programa de atención humanitaria financiado desde la Dirección General de Inclusión y Atención Humanitaria del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el número de personas migrantes vulnerables trasladados desde Canarias a la Península en el año 2020, fue de 2.168». Asimismo, prosigue la respuesta, «en el marco del programa indicado en la línea anterior, desde el 1 de enero hasta el 1 de mayo de 2021, el número de personas migrantes vulnerables trasladados desde Canarias a la Península, fue de 4.448».

Es decir, en los primeros cuatro meses del presente año hubo más del doble de traslados de estos inmigrantes irregulares que en los doce meses del ejercicio anterior. Cabe recordar que en octubre y noviembre de 2020 miles de inmigrantes irregulares llegaron a Canarias, llegando a colapsar el muelle de Arguineguín, en Gran Canaria. Entre estas «personas migrantes vulnerables» que fueron desplazadas a la Península en los primeros meses del año se encuentran aquellas que estuvieron alojadas en hoteles de las islas.

A finales de febrero, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, señaló en una sesión de control en el Senado que el Gobierno sólo trasladaba de Canarias a la Península a «colectivos vulnerables y susceptibles de protección internacional». Así se pronunció al ser preguntado por el senador de Coalición Canaria (CC) Fernando Clavijo sobre si el Ministerio del Interior estaba detrás de los viajes organizados de inmigrantes a distintos puntos de la Península.

«Efecto llamada»

En este contexto, y en otra respuesta escrita al grupo parlamentario de Vox en el Congreso, el Gobierno de Sánchez ha negado que exista un «efecto llamada», como denuncia el partido de Santiago Abascal a tenor de la «invasión de inmigración ilegal» y su tendencia «al alza» registrada en el primer trimestre del año. Así, las diputadas Macarena Olona y Rocío de Meer interrogaron al Ejecutivo sobre «los proyectos que plantea en 2021 en relación con la revocación del efecto llamada que existe en España para con terceros países africanos».

Sin embargo, Moncloa sostiene que «no hay demostración ni evidencia alguna de que exista un efecto llamada». A su juicio,»la presión migratoria sobre los países de la Unión Europea se debe fundamentalmente a la diferencia de niveles de renta y de vida, desigualdades socioeconómicas que se están incrementando en la actual situación de pandemia, en la que muchos países africanos carecen de sistemas de prestación sanitaria universales y de medios suficientes, tanto sanitarios como de servicios sociales, para afrontar los efectos de la misma».

Refugiado en el argumento de la crisis del coronavirus, el Ejecutivo de PSOE-Podemos esgrime que esta circunstancia ha originado que «la presión se incremente sobre los países que pueden disfrutar de servicios públicos mejores, y en los que muchos migrantes ven una oportunidad para sobrevivir, y están dispuestos a jugarse la vida».

En la misma respuesta, fechada el 10 de mayo, el Gobierno incluso llega a presumir de cómo «mantiene con sus socios africanos una perspectiva compartida en la gestión de los flujos migratorios», hablando además de «proyectos que han funcionado de manera muy satisfactoria». Apenas ocho días después, esta pose quedó desmontada con la entrada por el puesto fronterizo entre Ceuta y Marruecos de 10.000 inmigrantes ilegales.