España
AUDIENCIA NACIONAL

Francia da vía libre para juzgar a los jefes de ETA por el asesinato de Miguel Ángel Blanco

El Tribunal de Apelación de París ha autorizado a España a juzgar al ex jefe de la organización terrorista ETA José Javier Arizcuren, alias Kantauri, por el secuestro y el asesinato del concejal del PP en Ermua, Miguel Ángel Blanco. Tal y como adelantó OKDIARIO, el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional había emitido una orden europea de detención a Francia –país que entregó a los dirigentes de la banda terrorista– para poder sentar en el banquillo a la cúpula de la banda terrorista entre los que se encuentra Kantauri y otros como Iñaki Gracia ArreguiIñaki de RenteríaMikel Albisu, Mikel Antza; y Soledad IparraguirreAnboto. Ahora, el país galo deberá también pronunciarse sobre estos últimos.

Cabe recordar que el propio Tribunal de Apelación de París rechazó en junio del pasado año la orden de detención europea emitida el 4 de febrero de 2021 por el titular del Juzgado, Manuel García Castellón, al considerar que la misma estaba «vacía de contenido». Eso llevó a que el magistrado se viese forzado a acordar la emisión de una nueva orden, que ha sido finalmente resuelta por la Justicia francesa. Este trámite era necesario dado que Kantauri fue detenido en Francia en 1999 por unos hechos distintos a los que el magistrado investiga en esta causa.

Cúpula de ETA

Esta causa se reabrió hace un año a raíz de una querella interpuesta por la Asociación Dignidad y Justicia, cuya labor ha permitido que los crímenes cometidos por ETA se revisen gracias a la doctrina de la autoría mediata, por la que no sólo es culpable quien aprieta el gatillo, sino también quien da la orden de matar.

Así, el último informe de la Policía incorporado a la causa –en línea con la Guardia Civil– concluía que «los miembros del Comité Ejecutivo tenían la capacidad para decidir la concreta ejecución de una acción terrorista. Es más, en el caso de pretender atentar contra objetivos especiales, la dirección de ETA tenía que dar su autorización. En cuanto al asesinato de políticos/concejales del PP, existió orden expresa a una generalidad de comandos, entre ellos el Donosti, que fue responsable directo en el caso concreto de Miguel Ángel Blanco».

Los investigadores argumentaron que los cuatro etarras formaban parte de los tres aparatos que entonces conformaban la cúpula terrorista: el militar (Iñaki de RenteríaAnboto y Kantauri), el político (Mikel Antza) y el logístico (Iñaki de Rentería). Y los agentes determinaron en su informe que las decisiones se tomaban en las altas esferas de la organización, dado que «funcionaba de forma colegiada» y las decisiones se adoptaban por «unanimidad estratégica». La labor de los miembros de la cúpula era determinar «la línea estratégica política y militar, y también el diseño, la planificación, la coordinación, dirección y en ocasiones también la orden o autorización de realizar los atentados terroristas que eran materializados por los comandos operativos».

Por todo ello, consideran responsable de los atentados a los ex jefes de la banda y es por este que el juez quiere acordar el procesamiento de la cúpula terrorista por los delitos de asesinato, terrorismo y pertenencia a organización criminal entre otros.