El PP advierte a Ciudadanos que Rajoy es innegociable
Albert Rivera va a por todas. Por eso ha reiterado hoy que no tiene intención de apoyar «ni a Rajoy ni a Pedro Sánchez». Tampoco a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría para que se convierta en presidenta del Gobierno, como sugieren desde Podemos.
El líder de Ciudadanos ha insistido en que su objetivo es ganar las elecciones para encabezar el nuevo Ejecutivo. Intentará negociar los apoyos necesarios para ello si Ciudadanos es el partido más votado o si queda tan solo unas décimas por detrás de un PP que se muestre incapaz de cerrar pactos de gobierno.
Pero tal como ha informado OkDiario, en caso de que Rajoy gane las elecciones a larga distancia de sus rivales, Rivera ha adquirido el compromiso de facilitar que el PP forme Gobierno. Ciudadanos no entraría en el Ejecutivo y se limitaría a apoyar puntualmente desde las Cortes las iniciativas legislativas que resulten coherentes con su propio programa, tal como ha hecho con Susana Díaz en Andalucía y con Cristina Cifuentes en Madrid.
En la toma de temperaturas entre ambos partidos, los representantes del PP han dejado claro a Ciudadanos que en ese escenario la figura de Mariano Rajoy será innegociable. Los populares pretenden neutralizar así una operación –como la sugerida por Podemos– en la que el Albert Rivera pudiera ofrecer su apoyo al PP, a cambio de que Rajoy renuncie a la Presidencia en favor de otro líder de su partido.
Como ha informado OkDiario, en caso de que Ciudadanos se consolide como la segunda fuerza política, una vez traspasado el meridiano de la legislatura Albert Rivera endurecerá su labor de oposición para fortalecer la posición de su partido como alternativa de Gobierno.
Las ‘líneas rojas’ de Ciudadanos
Dado que todas las encuestas apuntan a que el PP perderá su mayoría absoluta, en un panorama de quiebra del modelo bipartidista, la política de alianzas va a ser más decisiva que nunca en estas elecciones. Pero Ciudadanos no puede permitirse descubrir sus cartas, comprometiendo su apoyo a otro partido, pues esto le convertiría en un personaje secundario de la campaña.
La consigna es realzar la figura de Albert Rivera como líder que tiene en su mano presidir el próximo Gobierno, ante el agotamiento del sistema de alternancia entre el PP y el PSOE.
Por hoy ha querido dejar claro, durante la recepción oficial ofrecida en el Congreso de los Diputados con motivo del Día de la Constitución, que no está dispuesto a gobernar «a cualquier precio».
Aludía así al socialista Pedro Sánchez, quien no oculta sus deseos de ser presidente mediante un pacto con Podemos, tras entregar al partido antisistema de Pablo Iglesias los gobiernos de las grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
«Nosotros queremos un proyecto común con los españoles», ha insistido Albert Rivera, mientras «otros hacen tripartitos con ERC, van con Bildu en las listas o pactan con partidos nacionalistas y con los Pujol».
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