España

Borrell se pasa al bando de Sánchez tras haber pedido la abstención al no sentirse respaldado

El ex ministro socialista Josep Borrell defendió la abstención para un Gobierno de Mariano Rajoy el 4 de julio. Por aquel entonces, Borrell comentaba: «Le corresponde al PP de Rajoy buscar quien complemente su minoría mayoritaria, ya que el bloque de centroderecha suma 169, y el de izquierda, suponiendo que quisieran sumar, 156».

En un artículo que escribió el socialista cercano a Pedro Sánchez explicaba que «hay dos maneras de abstención para el PSOE: una, sin contrapartidas ni condiciones, instrumentada técnicamente mediante la oportuna enfermedad de unos cuantos diputados», y la otra, a cambio de unas condiciones. «Poniendo el precio de un conjunto de medidas de tipo económico, social e institucional que el Gobierno minoritario se comprometa a impulsar», señalaba.

Tres meses después la hemeroteca le pasa factura al socialista que ahora se pasa al ‘lado oscuro’ para defender el ya famoso ‘no es no’ de Sánchez. Los que le conocen señalan que el motivo principal es porque «se sintió desamparado cuando le sucedió lo de Abengoa. Cuenta a sus allegados que el partido no le respaldó», comentan fuentes cercanas consultadas a OKDIARIO.

Borrell fue partícipe de la gestión de los grandes ‘pelotazos’ que dieron los responsables de Abengoa mientras el grupo se hundía. El socialista era miembro de la comisión de auditoría y también participaba en la vigilancia de «los criterios contables» de Abengoa, los mismos que llevaron a la empresa a declarar en junio de 2015 que disponía de 3.100 millones en caja. Cinco meses después todo eran deudas.

El ex ministro socialista no estuvo presente en el consejo de administración del 23 de septiembre de 2015, pero delegó su voto, por lo que en las actas de la sesión consta que participó en la reunión en la que se acordó el cese de Felipe Benjumea como presidente de Abengoa y se aprobó que tenía derecho a las indemnizaciones previstas en su contrato que ascienden a 11,48 millones de euros, pese a seguir vinculado a la sociedad como asesor externo con el mismo sueldo que tenía en la presidencia.

El ex ministro se defendió asegurando que él, como las demás personas que participaron en el consejo de administración de septiembre, defendieron la legalidad de las indemnizaciones tanto de Benjumea como del ex consejero delegado Manuel Sánchez Ortega, también imputado por administración desleal y además él por uso de información privilegiada. Aseguraron que era lo previsto en sus contratos y que fue aprobado por la junta general de accionistas y el consejo de administración.

Un mal trago donde los suyos no estuvieron, aseguran fuentes cercanas. Las mismas que insisten que debido a esto, el socialista ha firmado la petición de los ‘pedristas’ que recogen firman para forzar a la gestora a que celebre un Congreso Extraordinario y las primarias como propuso Sánchez la noche de su dimisión.

Borrell se acoge esta petición que de momento no tendría ninguna validez ya que, como publica OKDIARIO, será la Comisión de Garantías del PSOE quien las certifique. La Ejecutiva de Pedro Sánchez tendría que haber entregado el listado de militantes a la actual gestora. De no ser así, supondría un incumplimiento de los Estatutos y una posible vulneración de la ley de Protección de Datos. Estas mismas fuentes recuerdan que cualquier copia que pudiese salir de Ferraz sería igualmente ilegal.

Si alcanzan 93.500 firmas (la mitad del censo del PSOE), podrán solicitar formalmente al Comité Federal la convocatoria de primarias y congreso extraordinario donde aspiran volver a reelegir a Pedro Sánchez.