España

El ‘artista’ que profanó la tumba de Franco lleva 50 años intentando (sin éxito) llamar la atención

«Voy de fracaso en fracaso», confesó hace pocos meses en una entrevista. Nació en 1969 y tenía seis años cuando murió Franco, así que sus recuerdos de la dictadura son bastante difusos. Lleva 49 años intentando desesperadamente llamar la atención y en la última fiesta de Halloween lo consiguió: entró en la basílica del Valle de los Caídos y, mientras el cura oficiaba la misa, dibujó una paloma y la palabra «Libertad» con pintura roja sobre la tumba de Franco.

La mejor campaña de marketing para el interminable proceso de exhumación de Franco puesto en marcha por el Gobierno de Pedro Sánchez, que amenaza con convertirse en un episodio de The Walking Dead.

No es la primera vez que el «escultor» Enrique Tenreiro busca la fama con este tipo de golpes de efecto. En su canal de Youtube ha colgado el vídeo de su visita al cementerio de San Amaro (La Coruña) para «rendir homenaje a los artistas». Su performance consistió en ponerse a orinar en un árbol junto al cementerio.

También se ha hecho célebre la imagen (que acompaña a esta noticia) en la que aparece caminando desnudo por las calles de una población gallega. Tras su visita al Valle de los Caídos, la galería Artbys de San Andrés (La Coruña), en la que expone habitualmente sus obras, difundió el manuscrito que había escrito esa misma mañana para explicar su actuación.

El «escultor» Enrique Tenreiro, desnudo en una de sus ‘performances’.

«He decidido intentar una ‘acción artística’», señala Tenreiro, «consistente en pintar una paloma de la paz en la tumba de Franco. No busco hacer daño a su familia o seguidores, lo que busco es un espacio de libertad por ‘la libertad robada’ a la generación de nuestros padres y abuelos. Es mi pequeño grano de arena que espero sirva para aliviar el dolor de los perdedores de una guerra civil que se no debería haber producido».

Y aclara lo siguiente: «Yo mismo vengo de abuelos claramente implicados en ambas bandos y tengo la idea (tal vez muy ingenua) de que esto contribuya a ayudar a cerrar a herida de mucha gente, que aún guarda en sus corazones (…). Ojalá algún día ya no exista más rencor por nuestro pasado reciente».