España
Plan España 2050

Los aeronáuticos ridiculizan a Sánchez: los vuelos cortos que quiere prohibir sólo emiten el 0,1% del CO2

El plan del Gobierno para acabar con los vuelos en avión de corta duración, para evitar las emisiones de dióxido de carbono que producen, no se sustenta en datos científicos. Al menos así lo aseguran desde el Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España (COIAE), que acaba de revelar un informe en el que demuestran que esas emisiones sólo suponen un 0,1% del total a nivel nacional.

El ‘Plan España 2050’, anunciado a bombo y platillo por Sánchez el pasado mes de mayo, incluye entre sus líneas de acción la prohibición de los trayectos que se realizan en avión y que tengan como alternativa un viaje en tren inferior a las dos horas y media de duración. Algo sobre lo que el presidente no da ejemplo, como sus habituales viajes en Falcon o el desplazamiento que hizo a Toledo en helicóptero justo después de anunciar ese plan para acabar con los vuelos cortos.

Según el Gobierno, la medida sería clave para disminuir el impacto medioambiental del transporte aéreo. Esa medida afecta de lleno a los trayectos que unen Madrid con Valencia, Sevilla o Alicante. Rutas esenciales para el transporte de pasajeros en España que se quedarían sin conexiones aéreas.

El sector aeronáutico recibió esta noticia con indignación, conscientes de los graves efectos que tendría el fin de estos vuelos. Y más aún, tras constatar que los argumentos ecologistas del Gobierno no tienen base científica: la suma anual de los vuelos que Sánchez quiere prohibir sólo supone un 0,1% de las emisiones de gases nocivos a nivel nacional. Esa es la conclusión de un informe del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos, que ha analizado los datos de la actividad aérea en España en 2019. El último año que arroja resultados no marcados por la pandemia y el descenso de vuelos que supuso.

Lo mismo que los trenes diésel

Se trata, sostiene dicha investigación, del mismo porcentaje de emisiones que supone la circulación de ferrocarriles con locomotoras diésel que todavía siguen funcionando en España. Sin embargo, esos trenes no figuran entre las restricciones impuestas por el Gobierno de Sánchez.

Por otra parte, el informe de los aeronáuticos también se centra en el plan para reemplazar el puente aéreo entre Madrid y Barcelona, dejando únicamente como alternativa la alta velocidad ferroviaria. Ese puente aéreo emitió en 2019 el 0,68% de las emisiones totales de la aviación en 2019, por lo que su señalamiento tampoco se basa en criterios científicos.

Además, el COIAE advierte que la prohibición de este tipo de vuelos en los aeropuertos de Madrid y Barcelona tan sólo afectarían al 5% de las operaciones aéreas. Es decir, supondría romper rutas esenciales de transporte pero para obtener un rédito mínimo en términos medioambientales. Insisten también en las emisiones que supone el proceso de construcción de las vías de alta velocidad, asunto que el plan del Gobierno no tiene en cuenta.

Por ello, el Colegio de Aeronáuticos considera que la medida de Sánchez «tiene un impacto real inapreciable en las emisiones, y por tanto, es ineficaz en la lucha contra el Cambio Climático».