Más de 60 candidaturas de partidos extraparlamentarios se quedan fuera de las elecciones generales

Las Juntas Electorales Provinciales han proclamado un total de 1.090 listas al Congreso y al Senado para las elecciones generales del próximo 23 de julio, lo que supone un 14,57% menos que en los comicios de noviembre de 2019. En la criba han caído 66 candidaturas presentadas hace una semana de formaciones extraparlamentarias.

El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este martes las candidaturas definitivas para las 52 circunscripciones del Congreso y las 59 del Senado que se eligen el 23 de julio. En concreto, para estos comicios se ha dado el visto bueno a 1.090 candidaturas (550 al Congreso y otras 540 al Senado), 186 menos que en 2019.

Eso sí, hace una semana se habían presentado 1.156 listas, pero en estos días las juntas electorales han tenido que revisarlas para comprobar que cumplen los requisitos que exige la ley, corregir errores y estudiar los posibles recursos e impugnaciones que se puedan presentar.

La condena de los avales

La principal criba se debe a la obligación que pesa sobre los partidos extraparlamentarios de adjuntar avales, las firmas de al menos el 0,1% del censo. Otro de los requisitos que deben cumplir las candidaturas es el respeto de la llamada democracia paritaria, que implica que ningún grupo de sexo puede tener más del 60% ni menos del 40% de los puestos en cada tramo de cinco nombres.

Y la falta de los avales requeridos ha echado por tierra las listas de Caminando Juntos, el partido fundado por la ex dirigente de Vox Macarena Olona, en Madrid y Barcelona, así como las candidaturas de Por Un Mundo Más Justo (PUM+J) de seis provincias (Soria, Pontevedra, Murcia, Cantabria, Alicante y A Coruña); de escaños en Blanco en cinco circunscripciones (Soria, Tarragona, Barcelona, Burgos y Girona); y del Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCTE) en otras cuatro (Toledo, Castellón, A Coruña y Lanzarote).

Fuera de las elecciones se ha quedado el Partido Feminista de Lidia Falcón, cuyas dos únicas listas de Madrid y Cádiz han sido desestimadas, así como una agrupación de electores registrada en Málaga que solo presentaba un candidato.

Frente Obrero y PACMA

Así las cosas, además de las cuatro grandes formaciones parlamentarias de ámbito estatal (PSOE, PP, Vox y Sumar), los partidos que más listas han visto proclamadas, en casi todas las circunscripciones, son el Frente Obrero, el Partido Animalista (PACMA), la coalición Recortes Cero (Unificación Comunista de España, Demos+ y Viva!), Por un Mundo más Justo (PUM+J) y el Partido Comunista de los Trabajadores de España (PCTE y sus denominaciones autonómicas).

Detrás aparece un grupo de partidos extraparlamentarios que se presentan en varias provincias como Escaños en Blanco (10 listas al Congreso); Caminando Juntos (otras diez) y Falange Española y de las JONS, con ocho listas.

Por circunscripciones, si hace una semana Barcelona y Tarragona aparecían destacadas como las provincias más competidas con 17 y 16 lisas presentadas respectivamente al Congreso, con la criba de las juntas provinciales la cifra más alta de candidaturas por provincia se ha quedado en 14, que son las proclamadas en Palencia, Tarragona Valladolid y Zaragoza.

Por el contrario, las provincias con menos listas al Congreso son Albacete, Cantabria, Castellón, A Coruña, Ciudad Real y Huelva, así como Ceuta y Melilla, con ocho cada una.

Menos listas

En las elecciones de noviembre de 2019 se presentaron 1.310 listas a las Cortes Generales, pero finalmente se proclamaron 1.276 candidaturas y las restantes fueron rechazadas por no cumplir con alguno de los requisitos que establece la Ley Electoral o no acreditar los suficientes avales que se exigen a los extraparlamentarios.

En total, 4.456 personas (2.306 hombres y 2.150 mujeres) compitieron por ocupar un puesto en el Congreso de los Diputados, lo que supuso una media de 13 aspirantes por cada uno de los 350 asientos que conforman la Cámara Baja.

En la Cámara Alta fueron 1.276 candidatos (737 varones y 539 féminas) los que intentaron ocupar uno de los 208 escaños del Senado que se elegían (el resto los designan las comunidades autónomas), lo que representó una media de seis aspirantes por cada plaza.