coronavirus

La UCIR de la Jiménez Díaz ha atendido en los dos meses ‘pico’ de la pandemia el doble de pacientes que en 2019

intoxicaciones
Exterior de la Fundación Jiménez Díaz, donde están ingresados enfermos por coronavirus. (Foto: EFE)

El doble de pacientes atendidos que un año normal. Este es el balance de las personas atendidas durante los dos meses ‘pico’ de la pandemia en la Unidad de Cuidados Intermedios Respiratorios (UCIR) de la Fundación Jiménez Díaz.

Las UCIR están destinadas a monitorizar y prestar asistencia a pacientes que presentan insuficiencia respiratoria aguda y que, pese a no necesitar ingresar en la UCI, sí deben recibir una serie de cuidados específicos.

Una de estas unidades respiratorias más importantes del país está en el  Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, en la Comunidad de Madrid, avalada tanto por los reconocimientos que acumula como por el volumen de pacientes que atiende al año, que se ha visto incrementado en un 120% en tan sólo dos meses.

Las cifras hablan por sí solas: si habitualmente la UCIR de la Fundación Jiménez Díaz atiende al año a una media de 250 pacientes de alta complejidad, en los dos meses de pico máximo de casos graves ingresados por Covid-19 ha llegado a prestar asistencia a más de 550 personas.

La Unidad, que nació en 2009 y recibió en 2013 el Premio a la Mejor Gestión Hospitalaria otorgado por la Sociedad Madrileña de Neumología y Cirugía Torácica (NeumoMadrid) en reconocimiento a la organización y la eficiencia alcanzada, ha desempeñado así un papel clave durante la crisis sanitaria.

UCI

La doctora Sarah Heili, jefa asociada del Servicio de Neumología y Responsable de la UCIR de la Fundación Jiménez Díaz, explica que esta unidad «actúa en dos frentes casi a la vez y evita el colapso de la UCI». Primero, en la fase conocida como hiperaguda, que «contiene el número de ingresos en UCI evitando intubaciones que requerirían ingreso en esa unidad, ya que son enfermos muy graves pero muchos no necesitan finalmente el recurso a la intubación».

Posteriormente, en la denominada fase de defervescencia, que en esta ocasión se ha solapado en parte con la fase aguda, «evacúa de las UCI a los pacientes que necesitan mucho tiempo de ingreso para ser liberados del respirador y del tubo, con lo que se logra replegar las camas de UCI para Covid permitiendo que puedan atenderse ésta y las otras patologías urgentes con el fin de volver lo antes posible a la normalidad».

Lo último en Economía

Últimas noticias