Economía
saca pecho del PERTE del vehículo eléctrico

Sánchez presume de apoyar al automóvil pero 6.500 empleados se han quedado sin trabajo por un ERE

  • Andrea Aguado
  • Redactora de economía y coordinadora de OKMOTOR. Amante de las cuatro ruedas y la industria. Antes en informativos de Radio Televisión Castilla y León.

Desde que el Gobierno de Pedro Sánchez llegó al Palacio de la Moncloa a finales de 2019, en las principales fábricas de automóviles de España se han anunciado múltiples planes para el recorte de personal por la caída de la producción de coches. El último ha sido el expediente de regulación de empleo (ERE) aplicado en la planta de Ford en Almusafes que afecta a más de 1.100 trabajadores, lo que se traduce en casi un 20% de la plantilla actual -5.900 empleados-. Una cifras que tumban el discursos del Ejecutivo, que continúa vendiendo su defensa del sector y saca pecho del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del vehículo eléctrico y conectado a pesar del fracaso en el reparto de los fondos.

El pasado viernes, tal y como adelantó este diario, se conoció que la dirección de Ford Almusafes ha planteado un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a unos 1.144 trabajadores para ajustar la dimensión de la plantilla a los niveles de producción previstos tras el fin de los ensamblajes del S-Max y Galaxy.

Una medida que se engloba dentro del reajuste de plantilla que está llevando a cabo el fabricante en Europa y a la que hay que sumar la salida de 600 empleados en abril de 2021 y 400 en marzo de 2020, con lo que la compañía estadounidense ha reducido el número de trabajadores en la factoría Almusafes en más de 2.100 en tan sólo tres años.

Cierre de Nissan Barcelona

Un anuncio traumático pero no tanto si lo comparamos con el cierre de la planta de Nissan en Barcelona en diciembre de 2021, que afectó a unos 3.000 trabajadores -a 2.525 se les aplicó un ERE- y a otros 20.000 puestos de trabajo indirectos. El fin de la actividad del fabricante automovilístico japonés evidenció el poco interés del Gobierno de Pedro Sánchez y del Ministerio de Industria -Reyes Maroto- por la automoción, que dejó salir a la compañía sin conseguir un recambio industrial a la altura para ocupar Zona Franca.

Bajas voluntarias en Seat Martorell

Ford no ha sido el único fabricante automovilístico que ha anunciado una reestructuración de su plantilla recientemente. La dirección de la planta de Seat en Martorell también se ha visto obligada a corregir el excedente de personal con un plan de 1.130 prejubilaciones voluntarias a partir de los 61 años. A lo que también hay que sumar el anuncio de la salida de 1.130 trabajadores hasta 2026 por la caída de la carga de trabajo y la llegada de la producción de los nuevos vehículos eléctricos.

Otro de los fabricantes que ha adoptado medidas de reestructuración de empleo ha sido Stellantis en su planta de Vigo, donde ha planteado un ERE a principios de este año que afectará a un máximo de 100 trabajadores. Sin embargo, las factorías del grupo en Madrid y Zaragoza no se han visto afectadas.