Economía
gas

El gestor europeo de las redes de gas alerta del riesgo de escasez en España si el invierno es muy frío

El gestor europeo de las infraestructuras de gas, Entsog, donde está el español Enagás y sus homólogos en Europa, ha publicado sus previsiones para este invierno en el que concluye que en un escenario de frío extremo los países sufrirán escasez de gas y tendrían que reducir la demanda, en el caso de España en un 9%. Esto, en caso de que Rusia no corte definitivamente el suministro de gas a Europa y lo mantenga en el 7%. Con todo, España sería de los países menos afectados, junto a Portugal, gracias al gas natural licuado (GNL). Finlandia y los países Bálticos tendrían que reducir su demanda en un 27% en ese escenario y la mayor parte del resto de Europa, en un 18%.

Según el gestor de las infraestructuras europeo, este escenario de invierno de frío extremo derivaría en ese recorte de la demanda siempre y cuando los países europeos no alcancen la reducción del consumo de gas del 15% pactada y no compartan los suministros de gas. En ese escenario, el gestor sitúa a España como un país que podría nutrir de gas al resto del continente gracias a sus niveles de almacenamiento de gas natural licuado (GNL) y su poderío en regasificación.

El gestor europeo considera en este informe vital para Europa que todos los países cumplan con el plan de reducción del consumo de gas del 15%. Si se logra ese objetivo, ningún país tendría problemas incluso en el escenario de invierno más frío y de temperaturas más bajas. Sólo Finlandia y los países Bálticos tendrían que reducir en un 1% su demanda.

Rusia corta el grifo

En el caso de que Rusia corte definitivamente el suministro de gas a Europa este invierno, todos los países del continente tendrían energía suficiente para pasar estos meses siempre que reduzcan el 15% el consumo. El problema sería volver a llenar los almacenes para los siguientes meses. Actualmente, se encuentran en el 89%, frente al objetivo del 90% marcado por la Comisión para este invierno.

España está en el 93%, pero se ha ‘dormido’ respecto a otros países que hace unos meses estaban en torno al 40% y ahora han superado a España -que estaba por encima del 60% en las mismas fechas-, como Alemania, Francia o Italia.

En caso de que Rusia corte el suministro de gas, Francia, España, Portugal y Grecia podrían aguantar gracias a la compra adicional de GNL o a la reducción del consumo del 15%. El resto de países europeos sufriría cortes de la demanda en un 4% y Finlandia y los Bálticos, en un 13%.

Para asegurar el suministro, el gestor europeo de las redes de gas insta a los países a seguir llenando los almacenes de energía y a utilizar GNL y las importaciones en lugar del almacenamiento para evitar cortes de suministro este invierno y el próximo.

Consejo Europeo

Mientras, los ministros de Energía reunidos este martes en Luxemburgo no lograron un acuerdo para instaurar medidas que desacoplen el gas del precio de la electricidad. Ni la compra conjunta de gas, ni ampliar la excepción ibérica al resto del continente han generado un consenso. Francia, que compra luz barata en España gracias al tope al gas aprobado en junio, ha propuesto sumar a Reino Unido y a Suiza a este mecanismo para evitar que estos dos países hagan lo que ellos hacen en España: beneficiarse del mecanismo.

Tampoco han aprobado de momento el mecanismo de la doble subasta, una para Europa y otra para la luz que se exporta, un sistema que propuso España y que fue vetado por la Comisión.