Economía
BANCO DE ESPAÑA

Moncloa intentó enchufar al marido de Ribera en el Banco de España para blindarla en Bruselas

  • Jose de la Morena
  • Jose de la Morena, periodista especializado en economía desde hace más de 15 años, desarrolla su labor en el campo de la comunicación desde el prisma de las tendencias, los números y resultados de las distintas compañías. Una tarea que le ha llevado a conocer a fondo el mundo empresarial. Ha trabajado también en comunicación corporativa y como asesor para distintas marcas internacionales e institucionales.

Una incómoda conversación del ministro de Economía, Carlos Cuerpo, con una consejera del Banco de España, para pedirle que dimitiera del puesto, ha dejado entrever la intención real del Gobierno: existe el temor a que Ribera pueda perder su nombramiento como comisaria de Competencia porque su marido trabaja para un regulador en España. O el marido habría de dimitir.

El Ejecutivo parece anticipar la jugada. Quería el puesto vacío para, según fuentes cercanas a este movimiento, «tener vía libre a la hora de recolocar al marido de la ministra Ribera», Mariano Bacigalupo, que ha trabajado como consejero de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia -CNMC- y que si no lo remedia una sentencia judicial en contra será consejero de pleno derecho en la Comisión Nacional del Mercado de Valores -CNMV-. O lo es salvo que un juez termine determinando lo contrario.

Más allá del salto de un regulador a otro siendo su mujer ministra del Gobierno que autoriza esos puestos, Teresa Ribera tendrá que enfrentar entre el 4 y el 12 de noviembre el examen de Bruselas. Habrá de dejar claro ante los eurodiputados y encargados de auditar a quienes serán los nuevos comisarios que no tiene nada que ocultar. También tendrá que explicar que no existe conflicto de intereses alguno entre su vida privada y el cargo que ostentará en su vida pública. Y ahí reside el problema.

Aunque OKDIARIO desconoce las razones que llevaron al ministro Carlos Cuerpo a pedir la dimisión de la consejera del Banco de España -como publicó El Mundo-, sí ha podido saber que la intención que subyacía detrás de la petición era la de situar a Bacigalupo. Lo que resulta extraño es que Cuerpo se prestase al movimiento -él mismo no ha querido dar explicaciones al respecto-, dada la mala relación que tiene con el nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá.

De hecho, el propio Escrivá ha salido públicamente a defender a la consejera, garantizando su continuidad. Además, ha aprovechado para reforzar la idea de independencia en el Banco de España, en el aire tras su rápido paso desde el ministerio hasta el regulador bancario.

Casos precedentes

Teresa Ribera enfrentará el mes que viene las preguntas de los eurodiputados, y podría no lograr asumir su cartera como nueva comisaria de Competencia en la Unión Europea. Claro que sería extraño. Son contados los casos en los que las personas propuestas no pasaron el examen del Parlamento Europeo.

La búlgara Rumiana Jeleva no demostró suficientes conocimientos para ser la encargada de Cooperación Internacional, Ayuda al Desarrollo y Respuesta a la Crisis, pero el mayor problema no estaba en sus conocimientos: había dudas sobre su vinculación económica a través de distintas empresas con las ayudas que ella misma tendría que conceder. Algo similar le ocurrió a la candidata de Letonia, que no pudo aclarar la procedencia de algunos de sus ingresos. En 2004 también fue rechazado el candidato italiano por comentarios contra los homosexuales o contra las mujeres.

En todo caso, que rechacen al candidato de un país no lo deja sin el puesto, sino que obliga a ese país a proponer a otro candidato.

Bacigalupo y la CNMV

El marido de Ribera, Mariano Bacigalupo, es ahora consejero de la CNMV, pero está esperando la decisión del Tribunal Supremo sobre su nombramiento, ya que admitió a trámite un recurso de casación presentado por la Fundación Hay Derecho contra la resolución de la Audiencia Nacional que inadmitía, a su vez, el recurso por el nombramiento de Mariano Bacigalupo como consejero de la Comisión Nacional del Mercado de Valores -CNMV- por falta de «legitimación activa».

Como está admitido a trámite, ahora tiene que decidir si, efectivamente, da la razón a la Fundación Hay Derecho o, por el contrario, mantiene en el puesto a Bacigalupo, lo que a su vez puede suponer un problema para Ribera en Europa. Algo que trataba de solucionar el Gobierno.