La lista de todos los impuestos que van a subir a partir de enero de 2024

El panorama fiscal en España se vislumbra con cambios para el año 2024, ya que las arcas públicas proyectan un aumento del 7,5% en la recaudación en comparación con el presente año. Este incremento se sustentará principalmente en el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), la inflación y la generación de empleo. No obstante, las cotizaciones sociales y los impuestos también contribuirán a ampliar la suma final, aspirando a alcanzar los 382.755 millones de euros. Este esfuerzo tributario se considera esencial para asegurar el adecuado funcionamiento de servicios públicos cruciales, como educación, movilidad y sanidad.

Qué impuestos suben

La noticia ha generado preocupación entre los ciudadanos, quienes se preguntan qué impuestos experimentarán un aumento y cómo afectará esta medida a sus bolsillos. Aunque la percepción negativa de las cargas tributarias no es única de los españoles, cuando se trata de invertir en infraestructura, reducir desigualdades y financiar servicios públicos, la opinión de la ciudadanía tiende a cambiar. Según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el 59% de los españoles considera necesario pagar impuestos para mejorar las prestaciones públicas, mientras que el 84,3% aboga por más inversión en ciencia, tecnología y vivienda.

Las subidas de impuestos suelen ser recibidas con desgana por parte de los contribuyentes, pero las previstas para el próximo año se presentan apenas perceptibles. Tanto empresas como particulares, especialmente aquellos con ingresos más elevados, se verán afectados por la subida de un total de 14 impuestos en enero del año 2024. Uno de los tributos más afectados será el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), con un ligero repunte que no será uniforme y afectará de manera diferenciada a los contribuyentes. En particular, los beneficios por inversiones superiores a 300.000 euros serán los más impactados.

Otro aspecto que cambiará es el IVA aplicado a la cesta de la compra, ya que muchos productos perderán la bonificación especial que disfrutaron en los últimos meses.

El Ministerio de Hacienda prevé que al menos quince tributos experimentarán un ligero aumento en los próximos meses. Muchos de estos impuestos contaban con bonificaciones temporales debido a circunstancias como la crisis y la invasión de Ucrania. Por tanto, no se trata tanto de un incremento como de una vuelta a la normalidad que impacta negativamente en los bolsillos acostumbrados a ciertos alivios fiscales.

IRPF, el impuesto más afectado

El IRPF es uno de los impuestos más afectados, con una previsión de recaudar 204 millones de euros adicionales el próximo año. Este aumento se deriva de la ampliación de los tramos de ahorro aprobados recientemente. La subida implica un punto más de presión sobre las rentas de capital inferiores a 200.000 euros, elevándolas al 27%. Además, se ha creado un nuevo tramo al 28% para los beneficios por inversiones superiores a 300.000 euros.

En cuanto al IVA, la bonificación en alimentos de primera necesidad se mantendrá hasta junio de 2024, pero las compras sanitarias y la electricidad perderán el IVA especial el próximo año. Además, se implementará un nuevo impuesto sobre plásticos de un solo uso, que aportará 58 millones de euros adicionales, y el impuesto especial sobre la electricidad generará 1.032 millones más. Otros tributos, como el impuesto temporal de solidaridad a las grandes fortunas y el impuesto sobre el valor de producción de energía eléctrica, también contribuirán a aumentar la recaudación en 21 millones y 1.100 millones, respectivamente.

En el ámbito empresarial, el Impuesto de Sociedades experimentará una subida significativa debido a cambios en la compensación entre grupos, generando 609 millones de euros adicionales para el Estado. Sin embargo, la reducción del tipo impositivo para empresas con ingresos inferiores a un millón de euros anuales restará 282 millones a las arcas públicas. Además, el acuerdo entre el PSOE y Sumar contempla nuevas medidas fiscales para las grandes empresas, que podrían sumar hasta 10.000 millones más. También se prevén cambios en las cotizaciones sociales derivados de la sustitución del factor de sostenibilidad de las pensiones públicas, lo que sumará 1.017 millones de euros a la recaudación.