Economía
Theresa May

El índice del miedo se dispara ante el fracaso de May con el acuerdo del ‘Brexit’

El sector bancario especialmente sensible al acuerdo del 'Brexit'

Un 64% de las exportaciones podrían verse afectadas si se produce un 'Brexit' sin acuerdo

  • Natalia Mateos
  • Periodista y redactora de economía en OKDIARIO. Tras tres años escribiendo sobre turismo y sus empresas, ahora estoy descubriendo el mundo de la distribución y el retail. Antes en el Palacio de la Bolsa y Cadena Cope. De Zamora y del Zamora.

Theresa May anunció este lunes su decisión de retrasar la votación del acuerdo del ‘Brexit’, prevista para este martes, ante la perspectiva de una derrota propiciada por la negativa de varios diputados de su propio partido. Esta decisión ha disparado al VIX, dando lugar a una situación de incertidumbre en la que los mercados analizan los posibles escenarios económicos a los que se enfrenta Reino Unido.

Cuando este índice, cuya referencia son los movimientos del S&P500, sube, indica un aumento de la volatilidad en los mercados. Este lunes, el VIX subía más de un 10%, situándose por encima de los 25 puntos, y reflejando la incertidumbre de los mercados financieros.

Según un informe de Barclays, de momento, el mercado británico ha mantenido una actitud cautelosa frente a los posibles resultados del ‘Brexit’. En caso de que el Parlamento apruebe el acuerdo de May, las acciones de compañías británicas, y la libra esterlina, podrían repuntar gracias a un FTSE 100 y a la banca cotizando al alza. Sin embargo, un posible rechazo del acuerdo, con los consecuentes escenarios posibles, cambiaría la situación en los mercados.

Este lunes, la libra esterlina cayó frente al dólar y el euro en el mercado de divisas tras el anuncio del Gobierno de retrasar la votación. Concretamente, la libra sufrió una caída de un 0,4%, y alcanzaba su mayor desplome en 18 meses.

El informe señala que un rechazo ajustado del acuerdo de May, seguido de una segunda votación, es la apuesta de los principales inversores en el mercado británico. Si este escenario tuviera lugar la respuesta de los mercados sería discreta, con ligeros movimientos en la divisa británica.

Por otro lado, si el acuerdo es ampliamente rechazado por la Cámara de los Comunes, los mercados reflejarán esa incertidumbre con una elevada volatilidad. Sin embargo, las acciones de FTSE 100 y la libra esterlina ya presentan niveles bajos, por lo que la caída se vería limitada.

Un sector especialmente sensible a esta votación es el bancario. Si el acuerdo se aprueba con una votación ajustada, las entidades nacionales de Reino Unido podrían presentar ligeras subidas mientras que, si el acuerdo es rechazado por el Parlamento estos sufrirían una gran volatilidad en el precio de sus acciones. Las acciones de las principales constructoras de la isla británica también se verían directamente afectadas, especialmente aquellas con una mayor presencia en Londres como es el caso de Berkeley Group, y podrían sufrir un rally de en torno a un 20% si el acuerdo sale adelante.

2.300 empresas afectadas por la insolvencia

Según un informe de la aseguradora Crédito y Caución cerca de 2.300 empresas se verían afectadas si se produce un ‘Brexit’ sin acuerdo. El principal impacto afectaría a la aplicación de aranceles por parte de la Organización Mundial del Comercio (OMC), con lo que se verían afectadas alrededor de un 64% de las exportaciones. El informe destaca los posibles efectos que un Brexit ‘no negociado’ podría tener sobre el turismo español.

El Banco de Inglaterra ha elaborado un informe en el que analiza los posibles resultados de un ‘Brexit’ sin acuerdo y plantea diferentes escenarios entre los que destaca un acuerdo del ‘Brexit’ ‘disruptivo’, con subidas en los aranceles y las tarifas comerciales y un acuerdo de salida de la UE ‘desordenado’, en el que Reino Unido perdería los acuerdos comerciales con países extra comunitarios conseguidos a través de la Unión Europea.

Una salida no negociada de Reino Unido de la UE sería una amenaza especialmente para el sector servicios, puesto que las normas de la OMC no pueden evitar un bloqueo de Europa a la oferta de servicios de las empresas británicas en la UE y de la UE en el Reino Unido.