La patata caliente de IKEA en España: busca un modelo de negocio para el terreno que compró en Almería

El IKEA de Almería es posiblemente el último gran proyecto que la compañía sueca construirá en España. Meses antes de que la empresa comunicara un cambio de estrategia este mes de marzo con la marcha atrás en la construcción de cuatro granes almacenes en Escandinavia, las autoridades de IKEA en España habían firmado -el pasado 12 de diciembre-  con la promotora Carrida Grupo Inversor el traspaso de un solar de 40.000 metros cuadrados en la capital almeriense, pegado a la A-7 (Autovía del Mediterráneo) y muy próximo a la ciudad.

Sin embargo, las dudas sobre la final instalación de este centro comercial no paran de acudir, si se tiene en cuenta que IKEA ha dado marcha atrás a otros proyectos en provincias con más población que Almería, como son Tarragona y Coruña (IKEA de Vigo), o con la misma población pero una renta mucho más alta como es Navarra (IKEA de Pamplona, una ciudad donde se ha optado por mantener una tienda pequeña y renunciar a un gran centro de 30.000 metros cuadrados).

La gran diferencia entre Pamplona y Almería, sin embargo, es que en Pamplona IKEA se había comprometido a realizar una opción de compra sobre un terreno de Nasuvinsa (promotora pública del gobierno foral) para construir en unos terrenos suyos. En Almería ya se ejecutó la compra hace siete meses.

Es por este motivo que desde fuentes de la oposición municipal se considera que ahora mismo, tras adquirir el terreno junto a la autovía, lo que tiene IKEA es una «patata caliente» con el terreno de Almería como no hay otra en España.

La multinacional nórdica está buscando ahora mismo qué hacer con la parcela adquirida por un valor que no se ha hecho público. Y asegura que quiere que sea un proyecto icónico no sólo para la ciudad sino para toda Andalucía Oriental. La empresa ha manifestado su intención de hacer algo diferente al resto de grandes almacenes que existen por el mundo pero todavía se encuentra ‘peinando’ todo el globo y analizando las tendencias más novedosas para traer a la ciudad mediterránea un proyecto que sea ilusionante. No obstante, hay serias dudas sobre la posibilidad de que esto sea así, ¿es Almería el lugar idóneo precisamente para promover un proyecto innovador y nunca visto en España?

Expansión paralizada

Además actualmente IKEA tiene parada la expansión en España, por lo que Almería cobra más interés si cabe al ser el único gran proyecto que posiblemente vea la compañía en el país en los últimos años, si tenemos en cuenta que los cambios en los hábitos han puesto en duda el propio modelo de centros comerciales a la antigua usanza.

Este periódico se ha puesto en contacto con IKEA España, que no ha dado más detalles sobre el tipo de centros que está buscando. La empresa tampoco tiene plazos de ejecución por el momento, y tan sólo reconoce que el proyecto podrá variar pero su intención es de que sea un icono.

La multinacional nórdica se encuentra en pleno proceso de transformación del modelo de negocio, que tendrá que pasar en los próximos años de un modelo eminentemente offline (donde el consumidor acudía en masa a sus grandes centros de distribución para marcharse cargado con sus productos) a un modelo mixto, donde la petición de productos online también tendrá un peso específico.

En esta omnicanalidad, en la que el consumidor muchas veces acude al centro a ver ‘in situ’ los materiales pero luego prefiere pedirlos a través de internet, tienen menos sentido las grandes superficies con gran estocaje como son los centros que hasta ahora IKEA ha ido construyendo por España, que alcanzan los 16 por todo el país (Jerez, Sevilla, Málaga, Madrid -3-, Barcelona -3-, Asturias, Coruña, Vizcaya, Valladolid, Murcia, Valencia y Zaragoza).