Economía

Iberdrola lideró en 2023 el ‘boom’ de los PPAs en Europa con acuerdos cerrados para más de 900 MW

España vuelve a ser líder por quinto año consecutivo, aunque amenazado su primer puesto por Alemania

Iberdrola ha liderado en 2023 el ‘boom’ de los contratos de suministro de energía a largo plazo (PPA, por sus siglas en inglés) en el mercado europeo, con acuerdos firmados por un total de 908 megavatios (MW) en alianzas con grandes multinacionales, según el informe European PPA Market Outlook 2024 realizado por la consultora Pexapark.

En total, la energética, la mayor eléctrica de Europa por valor en Bolsa y la segunda del mundo, cerró el año pasado un total de nueve ‘megacontratos’ para suministrar luz ‘verde’.

La generación eólica marina (offshore), donde Iberdrola es uno de los líderes mundiales, fue protagonista de ellos, con un total de seis contratos en Alemania, país donde cuenta con el parque Wikinger, con una potencia de 350 MW ya en operación; así como con el de Baltic Eagle, de 476 MW que está en construcción; y con el de Widanker, que está en desarrollo con 300 MW.

Además, la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán suscribió dos acuerdos más para proporcionar energía fotovoltaica en España y otro de energía eólica terrestre.

En concreto, Iberdrola firmó en 2023 un PPA con el mayor fabricante mundial de materiales de freno, TMD Friction Services; así como con el grupo de telecomunicaciones Vodafone, con la siderúrgica Stahl Holding Saar (SHS) y con el Grupo Salzgitter, también centrado en la industria del acero.

La energética superó en actividad en este mercado de los PPA a FRV, que sumó un volumen de 869 MW cerrados el año pasado en este tipo de acuerdos; y a la estatal noruega Statkraft, que fue el vendedor más activo con 19 acuerdos aunque ascendieron a un total de 739,5 MW. También destacó Grenergy, en cuarto lugar con 728 MW acordados para el suministro en PPAs.

Iberdrola mantiene alianzas para el suministro de energía a largo plazo con ‘gigantes’ como Amazon, Telefónica, Mercadona, Holcim, Heineken, ABInBev, Apple, De Acero, VW-Seat, Mercedes Benz o Renault, entre otras compañías.

La eléctrica cuenta con una dilatada experiencia en el ámbito de los PPAs y gestiona acuerdos de compraventa de energía a largo plazo en mercados como España, el Reino Unido, Estados Unidos, México, Alemania y Australia, procedentes de proyectos renovables.

Esta apuesta estratégica ha llevado a Iberdrola a contar a cierre de septiembre con alrededor del 90% de la energía que prevé generar entre 2023 y 2025 ya vendida, principalmente a través de contratos de largo plazo y PPA, lo que proporciona a la empresa visibilidad con un amplio horizonte.

Por otra parte, en el lado de los acuerdos de contratos para adquirir energía ‘verde’ a largo plazo cerrados a lo largo del año pasado destacó Amazon, con un total de 1.870 megavatios (MW) en siete acuerdos.

El informe destacó que el mercado de PPA entró en su ‘Era Dorada’ en 2023 con una actividad récord, tras un entorno de estabilización en los fundamentos de la negociación de acuerdos, registrándose en el año la cifra total de 16,2 GW de volúmenes contratados, un 40% más con respecto a 2022. Así, el numero de acuerdos alcanzó un máximo de 272, creciendo un 65% con respecto al ejercicio anterior.

Por países, España volvió a ser líder, por quinto año consecutivo, en PPAs por volumen y número de operaciones, con un total de 4,67 gigavatios (MW), aunque amenazada ya seriamente por Alemania.

De este volumen total, la mayoría -unos 4,3 GW- procedieron de 37 acuerdos de la solar, mientras que la eólica terrestre apenas aportó 260 MW. Mientras, el volumen de contratos de Alemania en 2023 se situó ya en los 3,73 GW, de los cuales 1,77 GW -18 acuerdos- correspondieron a energía solar fotovoltaica y 1,73 GW -14 acuerdos- a eólica marina.

De hecho, de cara a 2024 los analistas de Pexapark vaticinaron que Alemania mantendrá su crecimiento y superará a España en esta actividad de PPAs. El gran beneficiado del mercado de PPAs es la industria, porque le permite tener energía a precios estables y competitiva, a largo plazo y ‘verde’, lo que favorece su descarbonización y la reducción de emisiones.