Economía

Moncloa presiona a los grandes fondos que controlan Naturgy: o sigue cotizando en Bolsa o vetará la opa

  • Jose de la Morena
  • Jose de la Morena, periodista especializado en economía desde hace más de 15 años, desarrolla su labor en el campo de la comunicación desde el prisma de las tendencias, los números y resultados de las distintas compañías. Una tarea que le ha llevado a conocer a fondo el mundo empresarial. Ha trabajado también en comunicación corporativa y como asesor para distintas marcas internacionales e institucionales.

La opa presentada sobre Naturgy desde la energética Taqa tiene intranquilo al Gobierno de Sánchez. La aceptación de la misma por parte de los fondos CVC y GIP (capital ya en manos de BlacRock) dejaría al valor en un estado de sequía. Como adelantó OKDIARIO, al ya escaso volumen que se puede negociar habría que restarle otro pedazo, lo que podría llevar a una opa de exclusión, que acabaría con Naturgy fuera del Ibex, como ha ocurrido en alguna otra plaza, ante la falta de negociación real por parte de los accionistas en el parqué. Moncloa presiona para lograr un pacto y ya ha dejado entrever que una opa de exclusión no es una opción, como no lo sería que Taqa lograse más de un 40% del capital de la energética española. Por eso presionan para que se pacte, de antemano, una opv posterior que volviera a dar liquidez y permitiese conservar, a pesar de los cambios, la situación actual de la compañía.

Fuentes consultadas por OKDIARIO aseguran que esas presiones desde Moncloa tratan de cerrar el acuerdo posterior ya, y de no lograrlo valorarían la entrada en el propio capital de la energética. Si no se dan las condiciones, desde el Ejecutivo saben que es más fácil declarar «empresa de interés estratégico» a Naturgy de lo que hubieran necesitado con Talgo y, en esa línea, se verían obligados a tomar una parte de la compañía.

Así están las negociaciones

A día de hoy, el Gobierno permitiría la operación sobre Naturgy esperarando que Taqa sólo se haga con la participación de CVC y GIP (Blackrock), a cambio de que, en caso de que por la composición accionarial el valor fuera a ser excluido de cotización, las partes se comprometan a una opv. Es decir; si no hay liquidez ambas partes tendrían que vender una parte y volver a dotar de liquidez bursátil a Naturgy. La dificultad reside en saber cuánto suponen esas participaciones, dado que, dependiendo de la aceptación que tenga la oferta de Taqa, el porcentaje que tendría con Caixa sería muy alto.

Isidro Fainé y Pedro Sánchez.

Desde Abu Dabi esperan tranquilos el momento de aceptación de la opa, y transmiten al Ejecutivo su intención de cumplir con lo necesario, sin entrar en detalles que, de momento y a falta de una aceptación formal, se antojan «demasiado lejanos».

Criteria, a través de cuyo capital realizará cualquier movimiento Caixa, también pide prudencia. Su preocupación pasa más por todo el trabajo que se debe de hacer en Naturgy, «el cumplimiento de sus objetivos y el blindaje de su plan industrial». Todo lo demás, mientras se negocia, son sólo «hipótesis». Por supuesto, su voluntad de acordar con todos los actores está presente en la negociación.

Con todas las piezas desplegadas, es IFM quien podría servir de bisagra para casi cualquier operación y, de momento, el grupo australiano es el que más alineado está con el Gobierno: ni quiere salir del valor, ni que haya exclusión, ni ceder su participación. Sobre todo si tenemos en cuenta que entraron hace tres años en la compañía y la revalorización, a precios actuales, es de un 1,3%.